Tratados sobre el Evangelio de Juan, 112-124; Tratados sobre la Primera Epístola de Juan

Título original:

Tractates on the Gospel of John, 112-124; Tractates on the First Epistle of John

Contenido del libro:

En este volumen, que concluye la traducción de John W. Rettig de los Tratados de San Agustín sobre el Evangelio de Juan, Agustín aplica su aguda perspicacia y sus poderes retóricos al texto sagrado, atrayendo a la audiencia a una contemplación íntima de Jesús a través del curso de su Pasión, Muerte y Resurrección.

Agustín aclara el significado de palabras y frases (a menudo apelando al texto griego), resuelve oscuridades y reconcilia aparentes contradicciones. Explica las Escrituras en varios niveles de significado y extrae de ellas implicaciones prácticas para la vida cristiana. En sus enseñanzas y exhortaciones se advierte siempre su vivo deseo de conducir a las almas al conocimiento y al amor de Dios.

Dado que las lecturas bíblicas para la Semana Santa y la Octava de Pascua estaban fijadas hasta cierto punto, durante la Octava de Pascua del año 407 d.C. Agustín tuvo que interrumpir su exposición del Evangelio de Juan después de pronunciar el duodécimo tratado. Para mantener cierta continuidad, decidió predicar sobre la Primera Epístola de Juan. Su tema central, que para Agustín era la caritas (amor cristiano), resultaba especialmente apropiado en aquel momento, ya que el cisma donatista había apartado a muchos de la Iglesia de Hipona. En los diez tratados sobre la Primera Epístola de Juan, Agustín desarrolla un esbozo de su teología sobre el amor y explica sus implicaciones para el Cuerpo Místico de Cristo. Enseña que quienes odian a los miembros de Cristo no pueden amar verdaderamente a Cristo, aunque profesen lo contrario, aunque dieran la vida por Él. En estos tratados Agustín se revela una vez más como el humilde y celoso pastor de almas. Sus palabras parecen irradiar el mismo amor del que habla, de modo que pocos de sus oyentes podrían acusarle de predicar lo que él mismo no practicaba.