Sobre los nombres-del-Padre

Opiniones de los lectores

El libro «Sobre los nombres del padre» se compone de dos conferencias de Jacques Lacan, que proporcionan información sobre sus teorías psicoanalíticas, pero resultan difíciles para quienes no están familiarizados con su obra. Mientras que algunos lectores aprecian la profundidad y el contexto histórico, otros critican su accesibilidad y su denso lenguaje académico.

El libro está repleto de ideas intrigantes y ofrece una perspectiva única del psicoanálisis, especialmente para quienes ya estén familiarizados con los conceptos de Lacan. La traducción de Bruce Fink es elogiada por su claridad. Además, la publicación ofrece una visión histórica del desarrollo de Lacan como pensador.

No es adecuado para principiantes o lectores ocasionales, ya que requiere un conocimiento previo de los conceptos lacanianos y freudianos. Muchos críticos consideran que el texto es denso y difícil de asimilar, y a menudo se sienten perdidos sin una base sólida en las teorías de Lacan. Algunos creen que puede servir más como curiosidad que como guía práctica de su obra.

(basado en 18 opiniones de lectores)

Título original:

On the Names-Of-The-Father

Contenido del libro:

Qué asombroso éxito ha tenido el Nombre-del-Padre Todo el mundo encuentra algo en él. Quién es el padre de uno no es inmediatamente obvio, apenas es visible a simple vista. La paternidad viene determinada ante todo por la cultura. Como dijo Lacan: "El nombre del padre crea la función del padre". Pero entonces, ¿de dónde procede el plural?

No es pagano, pues se encuentra en la Biblia. El que habla desde la zarza ardiente dice de Sí mismo que no tiene un solo Nombre. En otras palabras, el Padre no tiene un Nombre propio. No se trata de una figura retórica, sino de una función. El Padre tiene tantos nombres como puntales tiene la función.

¿Cuál es su función? La función religiosa por excelencia, la de unir las cosas. ¿Qué cosas? El significante y el significado, la ley y el deseo, el pensamiento y el cuerpo. En resumen, lo simbólico y lo imaginario. Sin embargo, si estos dos se unen a lo real en un nudo de tres partes, el Nombre del Padre ya no es más que mera apariencia. En cambio, si sin él todo se deshace, es el síntoma de un anudamiento fallido.

- Jacques-Alain Miller.