Peter Lindbergh Azzedine Alaa

Opiniones de los lectores

El libro recibió críticas dispares, con experiencias que iban desde una protección y entrega excelentes hasta una gran decepción con la calidad de impresión. Algunos elogiaron la fotografía, pero criticaron la elección del papel mate, que daba lugar a imágenes oscuras e indistintas.

Bien protegido durante el envío, entrega rápida, bella fotografía de Peter Lindbergh, a algunos usuarios les encantó la aportación artística de las imágenes.

Muchos usuarios se mostraron decepcionados con la calidad del papel, describiéndolo como de baja calidad y mate, lo que dio lugar a fotos oscuras y poco nítidas que no hacían justicia al tema tratado. Hubo quejas de repetición en la selección de imágenes e insatisfacción con la calidad general de la producción.

(basado en 11 opiniones de lectores)

Título original:

Peter Lindbergh. Azzedine Alaa

Contenido del libro:

Peter Lindbergh y Azzedine Ala a, el fotógrafo y el modisto, estaban unidos por su amor al negro, un amor que cultivarían por igual en prendas de estampado plateado y de color sólido. Lindbergh recurrió incesantemente al blanco y negro para significar su búsqueda de autenticidad en los rostros que sacaba a la luz. Ala a recurrió a la monocromía de las prendas intemporales para crear verdaderas esculturas para el cuerpo.

En este libro, el diálogo único entre los dos artistas queda inmortalizado en letra impresa. Ilustrando su comunidad de espíritu, sus imágenes son una celebración de su asociación artística y un testimonio de sus logros históricos en la fotografía y la moda.

A pesar de sus orígenes geográficamente opuestos, Lindbergh y Ala a persiguieron horizontes similares. Al mismo tiempo que la reputación de Lindbergh crecía en Alemania gracias a su trabajo en la revista Stern, y él establecía su estudio en París en 1978, Ala a era el modisto envuelto en la discreción cuyas sofisticadas técnicas eran un secreto atesorado entre los clientes más importantes de la Alta Costura.

Ala a se convirtió en el arquitecto de los cuerpos, revelándolos y desvelándolos, mientras que Lindbergh los distinguía iluminando su alma y su personalidad. Paso a paso, se convirtieron en los creadores que dominaban sus respectivas disciplinas. Ambos rechazaron cualquier artificio que distrajera de su verdadero tema, y con gran facilidad se unieron para una serie de poderosas colaboraciones.

Las inspiraciones y valores estéticos compartidos son visibles en toda su obra. Una playa de Le Touquet y las calles del viejo París hacen referencia a un amor mutuo por el cine en blanco y negro y los vastos panoramas. El telón de fondo de una sala de máquinas ilustra el recuerdo de un paisaje industrial alemán para uno y hace referencia a la pasión desmesurada por el diseño funcional y la arquitectura que siente el otro. Las prendas de Ala a actúan como pedestales para las sonrisas y los ojos de las mujeres que las visten: Nadja Auermann, Mariacarla Boscono, Naomi Campbell, Anna Cleveland, Dilone, Lucy Dixon, Vanessa Duve, Helene Fischer, Pia Frithiof, Jade Jagger, Maria Johnson, Milla Jovovich, Lynne Koester, Ariane Koizumi, Yasmin Le Bon, Madonna, Kristen McMenamy, Tatjana Patitz, Linda Spierings, Tina Turner, Marie-Sophie Wilson, Lindsey Wixson. Para Lindbergh, que construyó su notoriedad a partir de las imágenes de estas supermodelos, la autenticidad de sus rasgos es lo único que importa. El resultado es un potente catálogo en blanco y negro que reverbera veracidad y belleza. El libro acompaña a la exposición Azzedine Ala a, Peter Lindbergh en la Fondation Azzedine Ala a, 18 rue de la verrerie, París, Francia.

Con contrituciones de Fabrice Hergott, director del Mus e d'Art Moderne de la Ville de Paris, Paolo Roversi, fotógrafo, y Olivier Saillard, historiador de la moda y director de la Fondation Azzedine Ala a, París.