Fabricación y venta de St Einstein - V

Título original:

The manufacture and sale of St Einstein - V

Contenido del libro:

Según el mito popular, Albert Einstein originó el concepto de "espacio-tiempo". Sin embargo, Einstein no sólo no originó la idea de "espacio-tiempo", sino que se opuso enérgicamente a ella durante bastante tiempo. De hecho, las teorías sobre el espacio-tiempo han sido bastante comunes en el folclore, la filosofía, las matemáticas, la religión, la ciencia, la ciencia ficción, la psicología e incluso son inherentes a algunos idiomas.

Contrariamente al mito popular, Einstein no inauguró la era atómica. De hecho, la idea de la energía atómica le parecía una tontería. Einstein no fue la primera persona en afirmar la equivalencia masa-energía, o E = mc2. Mitos como los supuestos descubrimientos de Einstein no son infrecuentes. Newton no descubrió la gravedad, ni ofreció una explicación viable para ella, ni creía que la materia atrajera a otra materia. Consideremos que pocos en su época sabían que el Presidente Roosevelt sufría una grave minusvalía, estando limitado a una silla de ruedas, y la prensa cooperó en mantener en secreto la discapacidad de Roosevelt. ¿Es difícil creer que esa misma prensa presentó a Albert Einstein como un superhéroe de la ciencia, cuando en realidad era menos que eso, mucho menos? Era una buena historia para vender. Einstein escribió a Sommerfeld: "Es malo que cada una de mis declaraciones sea utilizada por los periodistas como asunto de negocios".

Einstein rara vez concedía entrevistas filmadas, pero cuando lo hacía daba la impresión de ser bastante menos que un "genio". Las apariciones públicas de Einstein eran guionizadas, al igual que sus conferencias. Sus apariciones públicas solían ser repeticiones de sus conferencias. Parecía ignorar la diferencia entre una conferencia académica y un acto mediático. Parecía ensayado e incapaz de adaptarse a su público. Einstein parecía un actor haciendo una representación. La comunidad de físicos y los medios de comunicación inventaron un personaje de cómic, "Einstein", con "E = mc2" grabado en el pecho. Los medios de comunicación y las instituciones educativas presentan esta imagen surrealista y farsesca como un dios benévolo que vela por nosotros. Algunos retratos modernos muestran al hombre con un resplandor divino y todas las demás señales visuales que inspiran reverencia. Para algunos, Einstein (a menudo junto con Marx y Freud) es fuente de un tremendo orgullo étnico.

Cuestionar a "Einstein", el dios, o "sus" teorías, o la prioridad de los pensamientos que repetía, se ha convertido en pecado de herejía. "Sus escritos son sinónimo de verdad, la verdad indescifrable de un dios colgado en la pared como símbolo de la verdad última, una verdad inasible para el hombre mortal. Nadie debe entender ni cuestionar los arcanos de "Einstein", sino dejar que el pastor guíe a su rebaño, sin objeciones. No hay que molestar a los creyentes con los hechos.