Puntuación:
El libro presenta una biografía detallada y atractiva de Francis O'Neill, un notable inmigrante irlandés que llegó a ser Jefe de Policía de Chicago al tiempo que preservaba con pasión la música tradicional irlandesa. Combina el contexto histórico con una narración animada sobre la vida y las contribuciones de O'Neill.
Ventajas:El libro está bien escrito y documentado, y ofrece una narración convincente sin jerga académica. Proporciona un rico contexto sobre la música irlandesa y la historia de Chicago, y presenta a un personaje fascinante como Francis O'Neill. Los lectores lo encuentran entretenido, humorístico e informativo, atractivo tanto para los músicos como para los entusiastas de la historia.
Desventajas:No se mencionan contras significativos, pero algunos lectores podrían esperar un estilo narrativo diferente si prefieren tratamientos más académicos o no les gustan las biografías.
(basado en 4 opiniones de lectores)
The Beat Cop: Chicago's Chief O'Neill and the Creation of Irish Music
La extraordinaria historia de cómo se forjó y difundió la música irlandesa moderna gracias a los descarados esfuerzos de un jefe de policía de Chicago.
La música irlandesa, tal como la conocemos hoy, no sólo se inventó en las callejuelas empedradas de Dublín o en los verdes campos del condado de Kerry, sino en la floreciente metrópolis estadounidense de Chicago a principios del siglo XX. Los límites del género combinan una larga tradición vernácula con las peculiaridades curatoriales de un hombre. Ese hombre era Francis O'Neill: un jefe de policía de Chicago más grande que la vida y un inmigrante irlandés con un intenso interés por la música de su país natal.
The Beat Cop, de Michael O'Malley, cuenta la historia de este personaje apenas conocido y poco investigado, desde su nacimiento en Irlanda en 1865 hasta sus accidentados comienzos en Estados Unidos. En 1901, O'Neill había ascendido hasta convertirse en jefe de policía de Chicago, donde desarrolló nuevos métodos para rastrear a las personas y registrar sus identidades. Al mismo tiempo, también rastreaba y grababa obsesivamente la música que escuchaba de los inmigrantes irlandeses locales, favoreciendo formas rurales específicas e imponiendo una visión estricta de lo que, en su opinión, era y no era auténtico. Su trabajo policial y su labor musical eran las dos caras de una misma moneda: como coleccionista de música, O'Neill localizaba melodías fugitivas, establecía sus antecedentes y las organizaba formalmente por tipos. O'Malley profundiza en el modo en que O'Neill aprovechó sus conocimientos policiales y sus contactos para publicar cancioneros clásicos que aún hoy se utilizan ampliamente, convirtiéndose en el principal artífice de la forma en que los estadounidenses ven y escuchan la música de Irlanda.
© Book1 Group - todos los derechos reservados.
El contenido de este sitio no se puede copiar o usar, ni en parte ni en su totalidad, sin el permiso escrito del propietario.
Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)