Nuestra América: Nativismo, modernismo y pluralismo

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Título original:

Our America: Nativism, Modernism, and Pluralism

Contenido del libro:

Argumentando que el compromiso contemporáneo con la importancia de la identidad cultural ha renovado, más que sustituido, un compromiso anterior con la identidad racial, Walter Benn Michaels afirma que la idea de cultura, lejos de constituir un desafío al racismo, es en realidad una forma de racismo. Nuestra América ofrece tanto una provocativa reinterpretación del papel de la identidad en el modernismo como una crítica sostenida del papel de la identidad en el postmodernismo.

"Tenemos un gran deseo de ser supremamente americanos", escribió Calvin Coolidge en 1924. Ese deseo, nos dice Michaels, está en el corazón mismo del modernismo americano, dando forma y sustancia a un movimiento cultural que, a su vez, redefiniría la identidad cultural y colectiva de Estados Unidos, en última instancia a lo largo de líneas raciales. Reinterpretación provocadora del modernismo estadounidense, Nuestra América ofrece también una nueva forma de entender los debates actuales sobre el significado de la raza, la identidad, el multiculturalismo y el pluralismo.

Michaels sostiene que el movimiento estético del modernismo y el movimiento social del nativismo confluyeron en la década de 1920 en su empeño por resolver el significado de la identidad: lingüística, nacional, cultural y racial. Del mismo modo que la Ley de Inmigración de Johnson de 1924, que excluía a los extranjeros, y la Ley de Ciudadanía India del mismo año, que honraba a los verdaderos nativos, reconceptualizaron la identidad nacional, los principales textos de escritores estadounidenses como Cather, Faulkner, Hurston y Williams reinventaron la identidad como objeto de pathos, algo que puede perderse o encontrarse, defenderse o traicionarse. Nuestra América es a la vez una historia y una crítica de esta invención, trazando su desarrollo desde el supremacismo blanco del periodo progresista hasta el pluralismo cultural de los años veinte. La relectura sostenida que Michaels hace de los textos de la época -los canónicos, los populares y los menos conocidos- pone de manifiesto preocupaciones recurrentes como la reconcepción de la imagen del indio como símbolo de pureza racial y orígenes nacionales, la relación entre la Primera Guerra Mundial y la raza, los llamamientos contradictorios a la familia como modelo para la nación y las ansiedades sobre la reproducción que vinculan subliminalmente la blancura y la identidad nacional con el incesto, la esterilidad y la impotencia.