Guía de los Emiratos Árabes Unidos: Turismo

Título original:

United Arab Emirates Travel Guide: Tourism

Contenido del libro:

Guía de viajes de los Emiratos Árabes Unidos. Turismo.

Hace un siglo, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) no eran más que dunas de arena, fortalezas en ruinas y aldeas de pescadores, pero ahora se han convertido en un destino que atrae todas las miradas y que ofrece una intrigante mezcla de cultura islámica tradicional y consumismo desenfrenado. Impulsados en gran medida (aunque no exclusivamente) por la riqueza petrolera, los EAU se definen hoy por sus opulentos hoteles, su arquitectura ultramoderna y una sed aparentemente inagotable de megaproyectos nuevos e innovadores. ¿Islas artificiales con forma de palmera? A las mil maravillas.

¿Reyes multimillonarios que se hacen con el control de clubes de fútbol de la Premiership? Sí.

¿El edificio más alto del planeta? Naturalmente. El país está formado por siete emiratos, pero la atención de los visitantes se centra principalmente en Dubai y Abu Dhabi.

Ambos albergan una creciente oferta de alojamientos de lujo, restaurantes gourmet, discotecas de marca y relucientes centros comerciales. Los lugares más emblemáticos de Dubai son el hotel de 7 estrellas Burj Al Arab, con forma de vela, el rascacielos Burj Khalifa y el Atlantis Resort, de temática marítima, que son microcosmos de las elevadas ambiciones de los EAU. El espectáculo de las fuentes del centro rivaliza con el del Bellagio de Las Vegas, mientras que grandes complejos comerciales como Dubai Mall (con uno de los acuarios más grandes del mundo) y Mall of the Emirates (con pista de esquí) están repletos de marcas internacionales de primera calidad.

Abu Dhabi, por su parte, no tiene el mismo brío, pero presume de algunas atracciones notables, desde la Gran Mezquita Sheikh Zayed hasta el parque temático Ferrari World. Y en ambos destinos existe la opción de adentrarse en la mezcla de cultura islámica y modernidad de los EAU, desde los zocos de especias hasta los hospitales de halcones. Mientras tanto, el vasto desierto natural ofrece un sinfín de descubrimientos a través de emocionantes medios de transporte, desde globos aerostáticos y quads hasta helicópteros o sandboard.