El octeto conciliar: Comentario sucinto a los ocho textos clave del Concilio Vaticano II

Opiniones de los lectores

El libro ofrece una visión sucinta y perspicaz de los documentos más importantes del Concilio Vaticano II, cuestionando las ideas erróneas más comunes y subrayando su continuidad con la Tradición católica. Constituye una clara introducción tanto para lectores noveles como experimentados en teología católica.

Fiel al significado del Vaticano II, estilo de redacción claro, introducción útil para los recién llegados, visión general concisa y erudita de los documentos clave.

Aunque no es estrictamente necesario, puede ser beneficiosa alguna lectura previa de teología católica.

(basado en 2 opiniones de lectores)

Título original:

Conciliar Octet: A Concise Commentary on the Eight Key Texts of the Second Vatican Council

Contenido del libro:

Continúa en la Iglesia Católica Romana un vivo debate sobre el carácter de la enseñanza aportada por el Concilio Vaticano II (1962-1965). ¿Representó una ruptura decisiva con la doctrina anterior, o la continuación de su mensaje anterior bajo nuevas condiciones? Mucho depende de si los textos del Concilio se leen a la luz de los acontecimientos posteriores, que sacudieron y a veces destrozaron la vida, el culto y la devoción del catolicismo tradicional, en lugar de considerarse por sí mismos, por derecho propio, como documentos con una prehistoria que los historiadores pueden conocer.

En esta obra, el erudito y escritor dominico Aidan Nichols sostiene que los textos conciliares deben interpretarse a la luz de su génesis, no de sus secuelas. Deben ser vistos a la luz de los debates públicos en la cámara del Concilio, no de las esperanzas (o temores) de individuos entre bastidores. Partiendo de esta base, ofrece un comentario conciso de los ocho documentos más significativos elaborados por el Concilio, documentos que abarcan de forma bastante exhaustiva todos los aspectos principales de la vida de la Iglesia.

Nichols describe el Concilio como una reunión en la que la minoría conciliar -guardada, prudente y preocupada por la continuidad explícita en todos los puntos con la tradición precedente- desempeñó un papel beneficioso para estabilizar a la mayoría conciliar, entusiasmada como estaba esta última por los movimientos de "retorno a las fuentes" bíblicas, patrísticas y litúrgicas y por el deseo de llegar al mundo de (entonces) hoy con generosidad de corazón. Los textos surgidos de este debate, a menudo apasionado, siguen siendo susceptibles de una lectura de tipo clásicamente cristiano. Eso es precisamente lo que Nichols ofrece en este libro.