Una defensa del juicio

Título original:

A Defense of Judgment

Contenido del libro:

Los profesores de literatura emiten juicios de valor. Dicen a sus alumnos qué obras son poderosas, bellas, sorprendentes, extrañas o perspicaces y, por tanto, cuáles merecen más tiempo y atención que otras. Sin embargo, el campo de los estudios literarios ha rechazado en gran medida los juicios sobre el valor artístico por considerar que están inevitablemente arraigados en prejuicios o enredados en problemas de estatus social. Desde hace varias décadas, los profesores califican su trabajo de neutro en cuanto al valor, simplemente como un medio para que los estudiantes adquieran conocimientos culturales, políticos o históricos.

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El provocativo libro de Michael W. Clune desafía estas objeciones al juicio y ofrece una visión positiva de los estudios literarios como institución de educación estética. Según Clune, es imposible separar los juicios sobre el valor literario de las prácticas de interpretación y análisis que constituyen cualquier modelo viable de pericia literaria. Clune imagina una política progresista liberada de las restricciones de la igualdad dogmática y animada por la educación en el juicio estético, que trascienda la cultura del consumo y las preferencias del mercado. Basándose en teorías psicológicas y filosóficas del conocimiento y la percepción, Clune aboga por el cultivo de lo que John Keats denominó «capacidad negativa», la capacidad de poner en duda los criterios existentes y descubrir nuevos conceptos y nuevos valores en las obras de arte. Pasando de la teoría a la práctica, Clune aborda obras de Keats, Emily Dickinson, Gwendolyn Brooks, Samuel Beckett y Thomas Bernhard, mostrando cómo la lectura atenta -la habilidad clave tradicional de la profesión- aprovecha el juicio para abrir nuevos modos de percepción.