Robar flores a los vecinos

Título original:

Stealing Flowers from the Neighbors

Contenido del libro:

Si uno de los objetivos de la poesía es condensar nuestro vasto, contradictorio y bello mundo en el más breve de los cantos, la primera colección de Sherri Levine se erige como testimonio de su posibilidad. Cada poema traza el mapa del corazón humano, en todos sus conflictos internos, con precisión y gracia. De las relaciones rotas a las sostenibles, de los miedos a envejecer a las exploraciones culturales, de la muerte familiar a los estudios de género, estos poemas indagan en las muchas paradojas de vivir con una mente y un corazón abiertos y curiosos. Hay aquí gran sabiduría y honestidad, vulnerabilidad y percepción lingüística. Esta serie de poemas meditativos lamenta y celebra simultáneamente la vida, anclándonos en un mundo familiar que acaba abriéndonos a algo mucho más grande.

--John Sibley Williams, autor de As One Fire Consumes Another y Skin Memory.

En parte elegía, en parte carta de amor, en parte confrontación consigo misma y con los demás, el primer libro completo de poesía de Sherri Levine traza un viaje emocional en el que explora los misterios a menudo confusos de la infancia a medida que evolucionan hacia los traumas y las alegrías ocasionales de la vida posterior: la confusión de una joven sobre los hombres, sobre la confianza, sobre la naturaleza de la cordura. Una difícil relación madre-hija se resuelve al final de la vida de la madre, y ésta se vuelve, en el recuerdo, "más bella". Problemas, amor, perdón. ¿No es así como transcurren nuestras vidas? La excelente colección de Levine reflexiona sobre estos enigmas vitales y ofrece un camino revelador hacia su comprensión.

--Andrea Hollander, autora de Azul confundido con cielo y Paisaje con figura femenina.

Con una gama artística y tonal, los intrépidos poemas de Levine rebotan entre lo cautivador y lo ineludible. En el fondo, el encanto es una extrañeza y la energía implacable, como ella cumple con savia dos secciones tituladas "Chica" (y luego) "Desatada". Ella sabe dónde termina el viaje y no pestañeará. Como lectores, más vale que nosotros tampoco. Con un humor a veces sutil a veces oscuro, imágenes magníficas o asombrosas, estos poemas recorren vericuetos y satisfacen a medida que aterrizan sobre pies seguros.

--John C. Morrison, autor de Monkey Island y Heaven of the Moment.