Reflexiones con Café matutino con Sor Vassa

Título original:

Reflections with Morning Coffee with Sister Vassa

Contenido del libro:

Este libro de devociones diarias pretende ser una ayuda para todos los interesados en hacer de la contemplación o la meditación parte de la vida cotidiana. Cada reflexión, basada en un pasaje de la Escritura y, ocasionalmente, en el calendario litúrgico del cristianismo bizantino, es breve, de modo que pueda encajar en una agenda apretada. Las reflexiones están pensadas para ser leídas sólo una vez al día, quizás con el café de la mañana, en el tren de camino al trabajo, o siempre que se disponga de cinco minutos. La breve reflexión diaria también debe combinarse con la oración diaria y un poco de autocrítica. Así es como se escribieron estas reflexiones, una al día, a lo largo de un año muy ajetreado en Viena, Austria.

Los pasajes de las Escrituras utilizados aquí se basan en la Nueva Versión Estándar Revisada, modificada a veces por la autora según su lectura del texto griego. Los pasajes del Antiguo Testamento se traducen a partir de la Septuaginta.

He aquí una muestra de lo que puede esperar:

"25 DE ENERO.

TENER MISERICORDIA.

"Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia". (Mt 5,7)

La palabra "misericordia" se menciona a menudo en los servicios religiosos bizantinos, especialmente en la breve oración: "Señor, ten piedad" (Kyrie eleison). La palabra griega "misericordia" (eleos) significa mucho más que una "suspensión del castigo" externa (que es lo que solemos entender en español). Es una energía divina; es decir, su fuente es Dios, por lo que se la pedimos constantemente. En nuestros términos, es una disposición interna; un desbordamiento del corazón con amor compasivo y generoso. Por eso, cuando le pido a Dios "misericordia", no sólo le pido recibirla, sino también llevarla a cabo; ser un recipiente de su "misericordia" en este mundo.

A menudo no me doy cuenta de las pequeñas oportunidades que tengo, a diario, de "tener misericordia" o "mostrar misericordia". Puede haber una persona o personas que dependan de mí de alguna manera, que busquen en mí, de alguna pequeña manera, compasión o al menos reconocimiento. Hoy puedo rebajar un poco mis exigencias y expectativas hacia ellos; puede que les alegre el día escuchar una palabra alentadora de mi parte, en lugar de una crítica.

Y yo misma entro en esta categoría, de personas necesitadas de mi "misericordia" Hoy puedo ser más gentil conmigo misma, soltando exigencias y expectativas irrazonables, y recordando cuidarme, con la palabra nutritiva de Dios, y en el Espíritu de su divina "misericordia"".

Derechos de autor hermana Vassa Larin 2016.