No nacemos sumisas: cómo el patriarcado determina la vida de las mujeres

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Título original:

We Are Not Born Submissive: How Patriarchy Shapes Women's Lives

Contenido del libro:

Una exploración filosófica de la sumisión femenina, utilizando ideas de pensadoras feministas -especialmente Simone de Beauvoir- para revelar las complejidades de la realidad y la experiencia vivida por las mujeres.

¿Qué papel desempeñan las mujeres en la perpetuación del patriarcado? Por un lado, los medios de comunicación populares instan a las mujeres a ser independientes, francas y a hacer carrera. Sin embargo, estos mismos medios glorifican una sumisión femenina específica, a veces voluntaria, como fuente de satisfacción. En filosofía, se ha hablado aún menos de por qué las mujeres se someten a los hombres y el debate ha sido igualmente contradictorio: la sumisión se ha considerado tradicionalmente un vicio o una patología, pero la sumisión femenina se ha valorado como innata a la naturaleza de la mujer. ¿Hay alguna forma de explorar la sumisión femenina en toda su complejidad, sin negar su atractivo en ciertos casos y sin caer en una perspectiva antifeminista, sexista o misógina?

No nacemos sumisas ofrece la primera exploración filosófica en profundidad de la sumisión femenina, centrándose en el pensamiento de Simone de Beauvoir y en trabajos más recientes de filosofía feminista, epistemología y teoría política. Manon García sostiene que para comprender la sumisión femenina debemos invertir nuestra forma de examinar el poder y verlo desde el punto de vista de la mujer. Históricamente, filósofos, psicoanalistas e incluso algunas feministas radicales han confundido feminidad y sumisión. García demuestra que sólo a través de la lente de las experiencias vividas por las mujeres -su situación económica, social y política- y de cómo las mujeres adaptan sus preferencias para mantener su propio bienestar, podemos entender las formas en que las jerarquías de género en la sociedad moldean las experiencias de las mujeres. En última instancia, afirma que las mujeres no eligen activamente la sumisión. Más bien consienten -y a veces disfrutan- lo que les prescriben las normas sociales dentro de un patriarcado.

Más allá del binario simplista de destino natural o vicio moral, No nacemos sumisas examina de forma sofisticada cómo puede explicarse la sumisión femenina.