La señora Despard y el movimiento sufragista: Fundadora de la Liga por la Libertad de la Mujer

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Título original:

Mrs Despard and the Suffrage Movement: Founder of the Women's Freedom League

Contenido del libro:

Charlotte Despard, reformadora social y sufragista, siempre fue conocida como Sra. Despard, nunca como Charlotte. Su nombre debería ser sinónimo de los de Emmeline Pankhurst y Millicent Fawcett.

Nacida en 1844, la infancia de Charlotte fue difícil: encontró consuelo en la gran literatura, identificándose con Milton y las palabras románticas de Shelley. Se casó con Maximillian Despard y tuvo la oportunidad de explorar el mundo y probar suerte como novelista.

Viuda a los 40 años, su dinero y su estatus le permitieron vivir una vida de libertad sorprendente para una mujer de su época. Charlotte dedicó su vida a mejorar la suerte de los pobres y se trasladó a vivir entre ellos en los barrios bajos de Londres. Luchó por unas condiciones de vida y de trabajo mejores y más justas para todos, apoyando el sufragio de los adultos antes de implicarse a fondo en la lucha por el voto femenino. Se unió a la Women's Social and Political Union de Emmeline Pankhurst y, cuando esta organización se dividió en 1907, cofundó la Women's Freedom League, convirtiéndose en su primera y muy querida presidenta. También fue editora y una de las principales colaboradoras de su periódico, The Vote. Cuando las actividades sufragistas se suspendieron en gran medida tras el estallido de la Primera Guerra Mundial en 1914, volvió a sus raíces irlandesas y se trasladó a Dublín para apoyar la lucha por la autonomía irlandesa. Después de que algunas mujeres obtuvieran el derecho al voto en 1918, intentó sacar provecho de la recuperación de la libertad política de la mujer (sin éxito) presentándose como candidata al Parlamento.

La carrera política y pública de Charlotte terminó trágicamente cuando murió en Belfast a los 95 años, sin un céntimo y sola, tras haber dedicado todo su dinero a ayudar a los menos afortunados. El silencioso legado de Charlotte perdura hasta nuestros días en su labor en favor de los derechos de las mujeres y los niños.