La doctrina de la impotencia del hombre

Opiniones de los lectores

Las reseñas elogian el libro de A.W. Pink sobre la doctrina de la «Impotencia del hombre», destacando su importancia para comprender la depravación humana y la necesidad de la gracia divina para la salvación. Los lectores aprecian la capacidad de Pink para articular conceptos teológicos complejos en un lenguaje accesible, y muchos recomiendan encarecidamente el libro por sus sólidos fundamentos bíblicos.

⬤ Clara articulación de conceptos teológicos complejos.
⬤ Sólida defensa bíblica de la doctrina de la impotencia del hombre.
⬤ Fomenta una comprensión más profunda de la depravación humana.
⬤ Desafía a los lectores y promueve la adoración.
⬤ A.W. Pink es un autor de confianza con una sólida reputación en la literatura cristiana.

⬤ La doctrina es difícil y puede ser vista como tonta por algunos.
⬤ El contenido puede ser punzante y polémico, lo que puede no gustar a todos los lectores.

(basado en 7 opiniones de lectores)

Título original:

The Doctrine of Man's Impotence

Contenido del libro:

El título de este libro, "La doctrina de la impotencia del hombre", puede causar sorpresa. Es probable que nos sorprenda que califiquemos de "doctrina" la impotencia espiritual del hombre caído, ya que la mayoría de los círculos actuales no la consideran así.

Sin embargo, no es de extrañar. La predicación didáctica ha caído en tal desuso general que más de una doctrina importante ya no se oye desde los púlpitos. Si por una parte hay una deplorable falta de una descripción clara y definida del carácter de Dios, por otra hay también una lamentable ausencia de una presentación lúcida y completa de la enseñanza de la Escritura sobre la naturaleza y condición del hombre.

Tal fracaso en cualquiera de los dos puntos conduce a las consecuencias más desastrosas. Por lo tanto, es oportuno y urgente un estudio de este tema descuidado".

Arthur Walkington Pink fue un evangelista cristiano y erudito bíblico inglés conocido por sus firmes enseñanzas calvinistas y puritanas. Aunque nació de padres cristianos, antes de su conversión emigró a una sociedad teosófica (un grupo gnóstico ocultista popular en Inglaterra durante esa época), y rápidamente ascendió en prominencia dentro de sus filas.

Su conversión se debió a las pacientes advertencias de su padre basadas en las Escrituras. Fue el versículo de Proverbios 14:12, "Hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero su fin son caminos de muerte", el que golpeó especialmente su corazón y le obligó a renunciar a la teosofía y seguir a Jesús.