Jesús y el pueblo de Dios: Reconfigurar la identidad étnica

Título original:

Jesus and the People of God: Reconfiguring Ethnic Identity

Contenido del libro:

¿Cómo trascendió el movimiento de Jesús -una versión sectaria mesiánica del judaísmo palestino- sus orígenes judaicos y acabó estableciéndose en el Oriente romano como el experimento socio-religioso multiétnico que conocemos como cristianismo primitivo? En esta importante obra, Hellerman, basándose en su formación como historiador social, propone que una clave del éxito del movimiento cristiano radica en la propia concepción de Jesús del pueblo de Dios y en cómo reconfiguró su identidad de etnia a familia.

Señalando en primer lugar la crítica de Jesús a la observancia del sábado, el templo de Jerusalén y las leyes dietéticas judías -prácticas fundamentales para la preservación de la identidad social judaica-, sostiene que la intención de Jesús era desestabilizar la idea del pueblo de Dios como una etnia localizada. En su lugar, concibió la identidad social del pueblo de Dios como una familia sustituta o grupo de parentesco, una entidad social basada no en la ascendencia común, sino en un compromiso compartido con el programa de su reino.

Así pues, Jesús de Nazaret funcionó como una especie de empresario étnico, derribando las fronteras del judaísmo étnico y proporcionando una base ideológica y un marco simbólico para la expansión más amplia del movimiento de Jesús.