Isaías 40-55

Título original:

Isaiah 40-55

Contenido del libro:

Los eruditos han aislado tradicionalmente tres secciones distintas de lo que se conoce como el Libro de Isaías, y en Isaías 40-55, el distinguido biblista Joseph Blenkinsopp ofrece una nueva traducción y un comentario crítico sobre la sección que suele denominarse Segundo o Deutero Isaías. El segundo volumen de un comentario en tres volúmenes, mantiene sin problemas el alto nivel de excelencia académica establecido por Isaías 1 -3 9.

El Segundo Isaías fue escrito en el siglo VI a.C., en los años inmediatamente anteriores a la caída del poderoso Imperio babilónico, por un profeta anónimo al que la historia ha identificado erróneamente con el verdadero Isaías (nacido hacia 765 a.C.). Los eruditos saben que el Segundo Isaías no fue escrito por Isaías porque los contextos de estas profecías son muy diferentes. Cuando se escribió el Segundo Isaías, el profeta creía que el tiempo de sufrimiento de Israel estaba llegando a su fin. Insistía en que se avecinaba una nueva era, un tiempo de esperanza, paz y renovada prosperidad nacional. La idea central del argumento del profeta era levantar el ánimo de un pueblo devastado por la guerra y la conquista. Uno de los ejemplos más famosos de este tono optimista es el conocido y querido Canto del Siervo Sufriente, que se encuentra en los capítulos 52-53, y sobre el que Blenkinsopp tiene algunas ideas nuevas y desafiantes.

Los capítulos finales del Segundo Isaías, sin embargo, se sitúan en un tono totalmente distinto, pues se hace evidente que el nuevo mundo que el profeta preveía anteriormente no iba a hacerse realidad. Esta desesperación encuentra su expresión más conmovedora en la sección final del Libro de Isaías, que Blenkinsopp abordará en su próximo tercer volumen.