Institutos de la Religión Cristiana: Primera versión inglesa de la edición francesa de 1541 (revisada)

Opiniones de los lectores

Las reseñas destacan que los Institutos de Calvino, en concreto la edición francesa de 1541 traducida por Elsie Anne McKee, ofrecen profundos conocimientos bíblicos accesibles al lector medio. Sirve tanto de recurso teológico como de guía para la vida cristiana, y sus puntos fuertes son la traducción y la legibilidad. Sin embargo, surgen algunas quejas sobre la calidad de la impresión y problemas de encuadernación en la edición, así como pequeñas imprecisiones en detalles de la traducción.

⬤ Rica visión bíblica y profundidad teológica
⬤ traducción accesible de Elsie Anne McKee
⬤ adecuada tanto para lectura académica como personal
⬤ lenguaje moderno que mejora la comprensión
⬤ considerada lectura obligada para los interesados en la doctrina cristiana.

⬤ Problemas de calidad de impresión que incluyen texto borroso y manchado
⬤ problemas de encuadernación que dan lugar a páginas sueltas
⬤ inexactitudes ocasionales en la traducción que pueden afectar a lectores críticos.

(basado en 9 opiniones de lectores)

Título original:

Institutes of the Christian Religion: The First English Version of the 1541 French Edition (Revised)

Contenido del libro:

a primera traducción al inglés de un texto clásico de teología pastoral.

Juan Calvino (1509-1564) escribió originalmente en latín sus famosos Institutos de la Religión Cristiana. A partir de la segunda edición de su obra, publicada en 1541, Calvino tradujo cada nueva versión al francés, adaptando simultáneamente el texto para adecuarlo al público laico, dándole una forma sutil pero clara para enseñarle, exhortarle y animarle.

Además de reflejar una inclinación más pastoral por parte de Calvino, estas Institutas de 1541 son también notables como uno de los documentos fundacionales de la lengua francesa moderna. La magistral traducción de Elsie Anne McKee de la edición francesa de 1541 -la primera versión inglesa de la historia- ofrece pleno acceso a la brillante mente de Juan Calvino cuando consideraba lo que todos los cristianos comunes debían saber y practicar.