Igualdad

Título original:

Equality

Contenido del libro:

En un estudio tras otro, Dinamarca aparece como el país menos corrupto del mundo, seguido de cerca por los demás países nórdicos. Como tales, estos Estados sufren considerablemente menos los efectos destructivos de la corrupción: subdesarrollo crónico, fuga de valiosos recursos nacionales, acceso limitado a servicios esenciales, hambruna, pobreza y crisis sanitarias. Cuando la ley no se aplica a todos y los que tienen medios pueden sobornar a los funcionarios cuando es necesario, la mayoría de la población pierde todo deseo y motivación para seguir las normas oficiales. El resultado es un Estado abrumadoramente disfuncional. Este libro sostiene que no es casualidad que Dinamarca sea el país menos corrupto del mundo, así como uno de los más ricos y felices. Investigadores y organizaciones internacionales, y Francis Fukuyama en particular, señalan ahora a Escandinavia, y a Dinamarca en particular, como modelo de Estado próspero y que funciona bien. Pero si «llegar a Dinamarca» es el objetivo de otros países, ¿cómo pueden conseguirlo? ¿Cuál es la fórmula secreta de los países nórdicos? El aumento de la desigualdad es una de las características más destacadas de la era moderna de las economías globalizadas. Para algunos observadores, la desigualdad es una consecuencia natural del crecimiento económico que debe aceptarse para garantizar un futuro próspero. Para otros, el aumento de la desigualdad es motivo de alarma, no sólo porque es injusta, sino también porque puede crear graves tensiones sociales.

Como ha dicho el Papa Francisco, «la desigualdad es la raíz del mal social». «Los países nórdicos destacan en parte por sus niveles relativamente bajos de desigualdad. Según la mayoría de los indicadores, son los lugares más igualitarios del mundo en la actualidad. Esta hazaña se ha logrado al tiempo que conservan economías de mercado capitalistas con un floreciente sector empresarial privado y derechos de propiedad arraigados: los nórdicos figuran sistemáticamente entre los mejores no sólo en lo que respecta a la igualdad, sino también en cuanto a un entorno favorable a la actividad empresarial. Este libro ahonda en lo excepcional de la igualdad en la región nórdica. Comienza esbozando «las cuatro igualdades» que hacen especiales a los países nórdicos: igualdad económica (la distancia entre pobres y ricos es relativamente baja), igualdad intergeneracional (el éxito en la vida no depende del estatus de los padres), igualdad de género (las mujeres están muy integradas en el mercado laboral y son independientes de la familia) e igualdad sanitaria (los pobres tienen acceso a los mismos tratamientos médicos que los ricos). Un punto central del libro es que necesitamos apreciar los cuatro tipos de igualdad para tener una visión completa de la igualdad en los países nórdicos.

Tras esta presentación, el resto del libro se dedica a comprender los orígenes de este particular resultado: ¿Por qué los países nórdicos se convirtieron en una sociedad tan igualitaria y cómo ha sido posible combinar esto con un fuerte crecimiento económico? La respuesta está en los singulares acuerdos políticos que se hicieron en el siglo XX y que conformaron las especiales economías sociales de mercado de estos países, y que afectan al crecimiento y la igualdad incluso hoy en día.