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Special Forces Berlin», de James Stejskal, es una historia exhaustiva de las operaciones de las Fuerzas Especiales del Ejército de Estados Unidos durante la Guerra Fría, centrada especialmente en el Destacamento A con base en Berlín. El libro está bien documentado, recoge misiones secretas y ofrece una visión de las vidas de los soldados que formaron parte de una unidad a menudo olvidada. Combina relatos de primera mano con una minuciosa investigación histórica, lo que lo convierte en una lectura atractiva para los entusiastas de la historia militar.
Ventajas:⬤ Historia detallada y bien documentada de una unidad única de las Fuerzas Especiales.
⬤ Proporciona información sobre las operaciones encubiertas durante la Guerra Fría.
⬤ La experiencia de primera mano del autor como miembro de la unidad añade autenticidad.
⬤ Una narración cautivadora y difícil de dejar.
⬤ Destaca misiones desconocidas hasta ahora, como el rescate de rehenes en Irán.
⬤ Atrae tanto a profesionales militares como a lectores en general interesados en la historia.
⬤ Contiene numerosos errores ortográficos y gramaticales.
⬤ Algunos lectores consideraron que las secciones intermedias se alargaban ligeramente o se hacían tediosas.
⬤ Ciertos relatos pueden percibirse como áridos o faltos de dramatización.
⬤ Se observó un deseo de más detalles sobre misiones específicas y la evolución de la formación.
(basado en 161 opiniones de lectores)
Special Forces Berlin: Clandestine Cold War Operations of the Us Army's Elite, 1956-1990
Es un hecho poco conocido que, durante la Guerra Fría, dos destacamentos de las Fuerzas Especiales del Ejército de Estados Unidos estaban estacionados detrás del Telón de Acero, en Berlín Occidental. La existencia y las misiones de los dos destacamentos eran secretos altamente clasificados.
Los enormes ejércitos de la Unión Soviética y sus aliados del Pacto de Varsovia suponían una enorme amenaza para las naciones de Europa Occidental. Los planificadores militares estadounidenses decidieron que necesitaban un plan para frenar el monstruo que esperaban en caso de guerra. El plan eran las Fuerzas Especiales de Berlín. Los primeros 40 hombres que llegaron a Berlín a mediados de 1956 pronto fueron reforzados por 60 más y estos 100 soldados (y sus sucesores) estarían listos para ir a la guerra con sólo dos horas de preaviso, en una zona hostil ocupada por casi un millón de fuerzas del Pacto de Varsovia, hasta 1990.
Su misión, en caso de que comenzaran las hostilidades, consistía en sembrar el caos tras las líneas enemigas y ganar tiempo para que las fuerzas de la OTAN, ampliamente superadas en número, pudieran escapar de la ciudad. En realidad se trataba de una misión ambiciosa y extremadamente peligrosa, incluso suicida. Altamente entrenados y con dominio del alemán, a cada hombre se le asignó un área específica. Eran expertos en operaciones clandestinas, sabotaje y operaciones de inteligencia, y podían actuar en caso necesario como operadores independientes, mezclándose con la población local y trabajando sin ser vistos en una ciudad inundada de espías que buscaban información sobre todos sus movimientos.
Las Fuerzas Especiales de Berlín fueron una unidad única sin parangón. Dejó como legado un nuevo tipo de soldado experto en guerra no convencional, que fue buscado para otros despliegues, incluido el intento de rescate de rehenes estadounidenses de Teherán en 1979. Con el reconocimiento oficial de su existencia por parte del gobierno estadounidense en 2014, ahora se puede contar su increíble historia.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)