El vicio solitario: Contra la lectura

Título original:

The Solitary Vice: Against Reading

Contenido del libro:

Mikita Brottman se pregunta por qué leer es tan bueno.

Es una práctica solitaria, que resta tiempo que podría dedicarse a desarrollar importantes habilidades para las redes sociales. La lectura no es necesaria para la salud, la felicidad o una familia afectuosa.

Y, si la lectura es tan importante, ¿por qué se necesitan eslóganes tan pegadizos como Leer cambia vidas y Los campeones leen para recalcarlo? Brottman se enfrenta sin miedo a la idea de que quienes no leen están condenados a una vida de desesperación y deterioro mental, y defiende que el valor de la lectura no reside en su capacidad para prevenir el Alzheimer ni en que sea un pasatiempo placentero. Al contrario, sostiene que, al igual que otro vicio solitario muy conocido, la masturbación, la lectura no es en última instancia un acto de placer, sino una herramienta de autoexploración que permite a las personas ver el mundo a través de los ojos de los demás y adentrarse en la oscuridad de la condición humana.