El tráfico de jerarquías: La masculinidad y sus otros en la Birmania budista

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Título original:

The Traffic in Hierarchy: Masculinity and Its Others in Buddhist Burma

Contenido del libro:

Hasta el reciente deshielo político, Birmania estaba cerrada a la mayoría de los investigadores extranjeros, y la investigación de campo era escasa. En The Traffic in Hierarchy, una de las pocas obras de este tipo aparecidas en los últimos años, el autor Ward Keeler combina una minuciosa atención etnográfica a la vida en un monasterio budista con un amplio análisis de la ideología de género birmana. El resultado es un sugerente análisis de las relaciones sociales birmanas tanto dentro como fuera de los muros de un monasterio.

Keeler demuestra que los papeles que eligen los individuos en la sociedad birmana conllevan inevitables concesiones en cuanto a privilegios y prestigio. Un hombre que se convierte en monje renuncia a algunas oportunidades sociales, pero asume otras y gana un gran respeto. También puede convertirse en cabeza de familia. O puede optar por adoptar una identidad de género femenina, para escarnio de muchos, pero no necesariamente para su exclusión social. De la mujer, en cambio, se espera que se ocupe de sus relaciones con la familia y los parientes. Cualquier interés que muestre por convertirse en monja suscita reacciones ambivalentes: aunque cumple las enseñanzas budistas, contraviene los supuestos sobre el papel adecuado de la mujer.

En Birmania, las concepciones jerárquicas condicionan todas las relaciones, pero la jerarquía implica relaciones de intercambio, no simplemente desigualdad, y todos asumen papeles subordinados en sus vínculos con unos, y superordinados con otros. Saber dónde reside el poder y cómo relacionarse con él adecuadamente es clave. A veces puede significar optar por resistirse al poder, pero más a menudo implica prestar atención a quién se quiere subordinar, de qué manera y en qué condiciones.

Combinando reflexiones sobre la obra de teóricos como Dumont, Anderson, Warner y Kapferer con una atención minuciosa a los detalles de la interacción social birmana, Keeler equilibra las ideas teóricas y la observación etnográfica para producir una lectura rica y estimulante. El enigma central de este libro -si optar por la autonomía, la búsqueda budista del desapego, o por el apego, el deseo de estrechar lazos con los demás- es algo a lo que todos los seres humanos, no sólo los birmanos, deben enfrentarse, y no admite una resolución definitiva.