El Señor Jesucristo: La devoción a Jesús en el cristianismo primitivo

Opiniones de los lectores

El libro de Larry Hurtado explora el tema de la devoción de los primeros cristianos a Jesús, cuestionando la idea de que el culto a Jesús se desarrolló tardíamente y estuvo influido principalmente por las ideas helenísticas. Basándose en una amplia investigación, Hurtado afirma que Jesús fue venerado como divino desde los inicios del cristianismo. El libro ha sido elogiado por su exhaustiva erudición, su análisis histórico y su nueva perspectiva de las primeras prácticas cristianas, aunque algunos lectores lo consideran demasiado erudito y complejo para el público general.

El libro, exhaustivo y minuciosamente investigado, aporta pruebas fehacientes de que los primeros cristianos consideraron divino a Jesús desde el principio. El hecho de que Hurtado se centre en las prácticas devocionales y no sólo en los títulos ofrece una perspectiva novedosa. Muchos críticos destacan la claridad, la estructura y el innovador enfoque histórico del escrito, así como su cuestionamiento de los mitos populares sobre las creencias de los primeros cristianos acerca de Jesús.

Algunos lectores consideran que el libro es demasiado erudito y complejo, lo que lo hace menos accesible para los profanos. Algunas suposiciones de Hurtado, como sus opiniones sobre la seudonimia en el Nuevo Testamento y la naturaleza de los escritos de Pablo, también frustran a algunos lectores. Además, se critica la extensión y densidad del libro, que podría disuadir a los lectores ocasionales.

(basado en 28 opiniones de lectores)

Título original:

Lord Jesus Christ: Devotion to Jesus in Earliest Christianity

Contenido del libro:

Este libro excepcional ofrece un estudio histórico en profundidad del lugar de Jesús en la vida religiosa, las creencias y el culto de los cristianos desde los comienzos del movimiento cristiano hasta finales del siglo II.

Señor Jesucristo es una obra monumental sobre la devoción cristiana primitiva a Jesús, que sin duda sustituirá a Kyrios Christos (1913), de Wilhelm Bousset, como obra de referencia sobre el tema. Larry Hurtado, ampliamente respetado por sus anteriores contribuciones al estudio del Nuevo Testamento y los orígenes cristianos, ofrece la mejor visión hasta la fecha de cómo los primeros cristianos veían y reverenciaban a Jesús como divino. Para componer este convincente cuadro, Hurtado se basa en un amplio conjunto de fuentes antiguas, desde las Escrituras y los escritos de figuras como Ignacio de Antioquía y Justino hasta textos apócrifos como el Evangelio de Tomás y el Evangelio de la Verdad.

Hurtado examina temas como las creencias primitivas sobre el estatus divino de Jesús y su significado, pero también explora prácticas devocionales reveladoras de la época, como la oración y el culto, el uso del nombre de Jesús en el exorcismo, el bautismo y la curación, la invocación ritual de Jesús como -Señor-, el martirio y fenómenos menos conocidos como las posturas de oración y la curiosa práctica de los escribas conocida hoy como nomina sacra.

El revelador retrato que emerge del exhaustivo estudio de Hurtado ofrece respuestas definitivas a preguntas como éstas: ¿Qué importancia tuvo este periodo formativo para la tradición cristiana posterior? ¿Cuándo se produjo por primera vez la divinización de Jesús? ¿Estuvo el cristianismo primitivo influido por religiones vecinas? ¿Cómo modificó la idea de la divinidad de Jesús las antiguas concepciones de Dios? ¿Y por qué la poderosa dinámica de las primeras creencias y prácticas animó a la gente a dar el costoso paso de convertirse al cristianismo?

Con una amplitud y profundidad de cobertura sin precedentes -el libro habla con autoridad de todo, desde la historia cristiana primitiva hasta temas de estudios bíblicos y cristología neotestamentaria-, El Señor Jesucristo de Hurtado es a la vez lo suficientemente importante como para que un amplio abanico de eruditos quiera leerlo y lo suficientemente accesible como para que los lectores generales interesados en los orígenes cristianos también saquen gran provecho de él.