El pan sagrado de la vida eterna: Restaurar la reverencia eucarística en una época de impiedad

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Título original:

The Holy Bread of Eternal Life: Restoring Eucharistic Reverence in an Age of Impiety

Contenido del libro:

Las últimas décadas se han visto empañadas por el abuso eucarístico generalizado, desde violaciones de las normas y rúbricas litúrgicas hasta prácticas que fomentan la irreverencia y facilitan el sacrilegio habitual. La crisis del coronavirus en 2020 ha provocado una nueva oleada de manipulación sacramental, desacralización y privación que no ha dejado indemne a casi ningún católico del mundo.

Estos inquietantes signos de los tiempos exigen una reevaluación implacable de las políticas, prácticas, costumbres y actitudes oficiales y no oficiales, junto con un nuevo aprecio por las minorías creativas que están tomando un camino diferente, más difícil y más exitoso hacia la reverencia.

El pan sagrado de la vida eterna es un libro poderoso y oportuno del erudito Peter Kwasniewski que exalta el don divino del Santísimo Sacramento, que nunca puede ser demasiado adorado, demasiado amado, demasiado cuidado ni demasiado sacrificado.

Basándose en ambos Testamentos, en los Padres de la Iglesia, en Santo Tomás de Aquino y en el Magisterio, Kwasniewski describe la adecuada veneración y manejo de este misterio de fe pasado y presente, las disposiciones que necesitamos cultivar para una fructífera recepción del Señor y las bendiciones que se derivan de una vida centrada en la Sagrada Comunión. Al mismo tiempo, el libro critica muchas novedades del culto católico moderno y muestra por qué deben dejarse de lado por la salud de las almas y de la Iglesia.

En los debates actuales sobre la Sagrada Comunión está en juego mucho más que las preferencias que se deben permitir o los deslices que se deben tolerar. Lo que está en juego es si realmente creemos en Jesucristo, nuestro Dios, nuestro Salvador, nuestro Amigo y nuestro Juez, realmente presente en la Eucaristía; si reconocemos y aceptamos su señorío sobre nosotros en todos los aspectos de lo que hacemos y decimos; y si actuaremos, reaccionaremos, adoraremos y rezaremos de un modo coherente con la verdadera creencia.