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The Meuse-Argonne 1918: The Right Bank to the Armistice
Los estadounidenses tuvieron un éxito inicial considerable cuando lanzaron su gran ofensiva contra los alemanes en Mosa-Argonne en los últimos días de septiembre de 1918. Sin embargo, no todo fue como la seda y el ataque se empantanó, frenado por las diversas líneas del Sistema Hindenburg y los problemas logísticos. Un importante obstáculo adicional fue la presencia de baterías de artillería alemana en el terreno elevado de la orilla derecha del Mosa, casi sin sufrir ningún asalto significativo por parte de las fuerzas aliadas. Estos cañones crearon graves problemas a los mandos estadounidenses y a sus tropas.
Finalmente se asignaron recursos suficientes para un ataque americano-francés en la orilla derecha, con el objetivo de eliminar la artillería alemana y expulsar a los alemanes de las alturas del Mosa, parte de la renovada ofensiva en la orilla izquierda y el bosque de Argonne.
La acción se desarrolló a menudo sobre un terreno que ya había sido escenario de feroces combates durante la batalla de Verdún en 1916 y la ofensiva francesa de finales del verano de 1917. También supuso la difícil tarea de transportar grandes masas de tropas a través del río Mosa y su canal asociado.
El terreno es accidentado e, incluso entonces, bastante boscoso. Las tropas estadounidenses y francesas tuvieron que luchar a menudo cuesta arriba y frente a las defensas alemanas que se habían desarrollado durante los doce meses anteriores. Por otra parte, la calidad de las tropas defensoras no era alta, ya que Alemania se enfrentaba a tanta presión en otros sectores, e incluía un número significativo de tropas austrohúngaras. La opinión popular tiende a menospreciar la calidad combativa de estas tropas austriacas que, de hecho, tuvieron una buena actuación.
Los recorridos llevan al visitante por bellos paisajes, con impresionantes vistas sobre el Mosa y la llanura de Woevre. Todavía se pueden ver importantes vestigios de la guerra, como numerosos búnkeres de observación y refugios, así como trincheras. Un rasgo insólito de la zona son los vestigios de parte de la Línea Maginot, sobre todo búnkeres (algunos de gran tamaño) y la infraestructura ferroviaria de apoyo, que a veces aprovecha líneas que los alemanes construyeron durante la Primera Guerra Mundial.
Uno de estos recorridos sigue el destino de Henry Gunther, oficialmente el último soldado estadounidense muerto en combate en la Gran Guerra. Existe un gran mito sobre Gunther; se examinan los hechos que rodearon su muerte y se sitúa su última acción sobre el terreno. Hay un recorrido dedicado sólo a él.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)