El club cubano: Cuentos

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Título original:

The Cuban Club: Stories

Contenido del libro:

Obra maestra del humor y la ambientación, del carácter y el recuerdo, El club cubano es la historia definitiva de Barry Gifford sobre la mayoría de edad, contada en sesenta y siete relatos enlazados, un mito de la creación de la Caída visto a través de los ojos de un niño inocente a punto de convertirse en un hombre inocente. Ambientada en el Chicago de los años 50 y principios de los 60, con el telón de fondo de los matones de poca monta de la mafia de Chicago y las chicas y mujeres ligadas a ellos, está la proximidad de crímenes atroces y el precio que hay que pagar por ellos.

Para Roy y sus amigos, estos giros y tragedias pasan a la deriva como curiosos restos flotantes. Los propios relatos parecen koanes, a menudo terminan en preguntas y rara vez tienen una conclusión. La historia que cierra el libro es una carta de Roy a su padre cuatro años después de su muerte, pero escrita como si aún estuviera vivo.

De hecho, a lo largo de The Cuban Club Roy duda de si el divorcio o incluso la muerte existen realmente en un mundo en el que todo parece tan vivo y conectado. Barry Gifford lleva más de treinta años escribiendo sus historias de Roy de forma intermitente, y las anteriores se publicaron en Wyoming, Memories from a Sinking Ship y The Roy Stories.

Pero es en El club cubano donde cristaliza la forma que ha creado en estas historias. De hecho, para encontrar precedentes de El club cubano, no debemos mirar a otras colecciones de relatos, sino a otros mitos de la creación: a Gilgamesh, al Antiguo Testamento o a la trilogía Memoria del fuego de Eduardo Galeano.

La edad de Roy aquí oscila entre los seis y los diecinueve años y vuelve a los doce. Ve con los ojos de un vidente que no parece envejecer, y sabe que no debe juzgar lo bueno o lo malo de las circunstancias o de las personas, ni siquiera preguntarse por qué las cosas son como son, sino que se deja llevar por el romanticismo de un mundo que se tambalea siempre hacia la catástrofe, pero que abunda en gracias salvadoras.