Ya basta: Escenas de la infancia

Opiniones de los lectores

El libro es una deliciosa memoria de los primeros años de Stephen Hough, caracterizada por la calidez, el ingenio y la honestidad. Recoge su trayectoria musical y sus experiencias personales en una narración encantadora que mantiene enganchados a los lectores.

Un estilo de escritura atractivo y divertido, una narración honesta y sincera, una visión fascinante de la vida del autor y un tono cálido y encantador. A muchos lectores les costó dejarlo, y algunos lo leyeron de una sentada.

Algunos lectores opinaron que las memorias profundizaban demasiado en detalles personales y se centraban poco en la interpretación del piano. Algunas críticas sugieren que no es lo que todo el mundo espera de la autobiografía de un pianista.

(basado en 7 opiniones de lectores)

Título original:

Enough: Scenes from Childhood

Contenido del libro:

Un apasionante y franco libro de memorias de uno de los pianistas más importantes del mundo.

«Las memorias de Stephen Hough me atraparon desde el principio (...) fascinantes y reveladoras. La mayoría de las memorias me dan mucho más de lo que quiero saber; ésta es de las pocas que me han dejado pidiendo con urgencia un segundo volumen, un tercero, un cuarto. Me ha encantado». -- Philip Pullman

Stephen Hough es indiscutiblemente uno de los mejores pianistas del mundo, aclamado en todo el mundo y galardonado con numerosos premios.

Estas memorias narran su poco convencional historia de madurez, desde sus comienzos en un hogar poco musical de Cheshire hasta el escenario principal del Carnegie Hall de Nueva York a los 21 años. Nos habla de su temprana pasión por el piano que, tras una crisis nerviosa en la adolescencia, se convirtió en fracaso escolar y en seis horas diarias viendo la televisión, sumido en sueños, oscilando entre obsesiones sexuales y religiosas. Conocemos a sus padres, tan comprensivos como excéntricos: su padre, artísticamente frustrado, y su madre, que odiaba las tareas domésticas. Conocemos a los profesores que le animaron e inspiraron, y a otros que le golpearon en la cabeza gritándole «no harás nada con tu vida». Después de abandonar sus planes de una vida alternativa como sacerdote católico, volvió al piano y prosperó en el Royal Northern College of Music y en la Juilliard School, comenzando su carrera como solista internacional al final de este libro.