Violencia en escuelas, institutos y universidades

Título original:

Violence in Schools, Colleges & Universities

Contenido del libro:

Hace tres décadas, Woodrow W. Clark realizó su tesis doctoral en la Universidad de California, Berkeley, sobre la violencia en las escuelas públicas.

Por aquel entonces, era un gran tema que acaparaba mucha atención. Clark pasó después una década en los medios de comunicación haciendo documentales sobre este tema y otras cuestiones sociales. Ahora, la violencia en las escuelas públicas se ha ampliado de K-12 a colegios y universidades debido a la creciente cantidad de violencia en ese nivel.

De ahí que Clark y Kuhn hayan escrito un libro que analiza el problema de la violencia escolar desde una perspectiva tanto cualitativa como cuantitativa.

Una cuestión clave entonces y ahora es que se puede considerar que la violencia en cualquier institución procede de personas relacionadas con ellas y de dentro de ellas, por lo que la mayor parte de la violencia en las escuelas es resultado de personas que son alumnos e incluso antiguos profesores. Además, el problema no es sólo la violencia física, sino también la violencia psicológica que el agresor ha experimentado durante su estancia en el entorno educativo.

Una vez que los lectores se dan cuenta de que las razones de la violencia son psicológicas, se puede ver que la historia de la violencia está directamente relacionada con las prioridades económicas que tiene la educación. La mayor parte del dinero de la educación se destina a los mejores estudiantes y deportistas, que representan sólo el 10% de la población estudiantil y del personal. Esta táctica y enfoque ignora al otro 90%.

Por eso, cuando la gente necesita ayuda en sus estudios o incluso en actividades extraescolares, hay pocos recursos. El resultado suele ser el acoso y la discriminación. Aunque las soluciones a la violencia pasan absolutamente por la seguridad y el apoyo psicológico, lo más eficaz son los recursos financieros repartidos entre todos los niveles de estudiantes y personal.

Se necesitan nuevos programas que tengan en cuenta la raza, el sexo y el apoyo profesional, así como la seguridad dentro de las propias instituciones. Este libro ofrece muchos casos/ejemplos de lo que hay que hacer y de lo que se puede hacer ahora para prevenir la violencia del mañana.

( Nova)