Vida y legado de Elizabeth Miller Watkins: Una filántropa pionera

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Título original:

The Life and Legacy of Elizabeth Miller Watkins: A Pioneering Philanthropist

Contenido del libro:

Pocas mujeres han tenido un impacto más significativo en el desarrollo y crecimiento de Lawrence, Kansas, y de la Universidad de Kansas que Elizabeth Miller Watkins.

Elizabeth Josephine Miller nació en Ohio en 1861 y se trasladó con su familia a Lawrence cuando era niña. Asistió a la escuela preparatoria de la Universidad de Kansas en la década de 1870, pero no pudo completar sus estudios cuando una crisis financiera familiar la obligó a buscar empleo. Comenzó a trabajar en la J. B. Watkins Land and Mortgage Company en 1887 como secretaria y en 1909 se casó con el fundador y propietario de la empresa, Jabez Watkins. Juntos, los Watkins se dedicaron a la filantropía y se comprometieron a donar todo su patrimonio, como dijo Elizabeth, "para el bien de la humanidad, principalmente aquí en Lawrence". Jabez murió en 1921, dejando a Elizabeth sola en la gestión de la fortuna familiar.

Elizabeth deseaba dar a las mujeres la oportunidad de cursar estudios superiores que ella misma nunca había recibido. En 1925, el Consejo de Regentes de Kansas aprobó su petición de construir una sala de becas para mujeres en la KU. Watkins Hall, llamada así en memoria de su difunto marido, se construyó cerca de la casa de Elizabeth -actual residencia del Rector- y fue seguida una década más tarde por la construcción de Miller Hall en 1936. Como dos de las doce salas de becas de la Universidad de Kansas en la actualidad, Watkins y Miller Halls son el hogar de una vibrante cohorte de jóvenes académicas y una activa comunidad de alumnas que continúan la visión filantrópica de Elizabeth Miller Watkins.

En 1929, Elizabeth donó 200.000 dólares para que se construyera el nuevo Lawrence Memorial Hospital en la 3ª y Maine, donde permanece hoy. También fundó el primer centro sanitario dentro del campus, el Watkins Memorial Hospital de la Universidad de Kansas (ahora Twente Hall) en 1931.

En esta encantadora biografía, la exhaustiva investigación de Mary Dresser Burchill y Norma Decker Hoagland traza con éxito el retrato de una mujer extraordinaria cuya generosidad perdura en la KU y en Lawrence saca a la luz el asombroso legado de una de las principales filántropas de la ciudad.