Unspeak: Cómo las palabras se convierten en armas, cómo las armas se convierten en mensaje y cómo ese mensaje se convierte en realidad

Opiniones de los lectores

El libro «Unspeak», de Steven Poole, examina el mal uso del lenguaje en la política y los medios de comunicación, destacando cómo la terminología puede distorsionar el significado y manipular la percepción pública. Aunque ofrece un análisis perspicaz que anima a los lectores a escudriñar el lenguaje con más atención, también recibe críticas por desviarse hacia desvaríos políticos partidistas y por su falta de concentración en algunos momentos.

El libro ha recibido elogios por su redacción atractiva y elegante, su perspicaz análisis del lenguaje político y su forma de concienciar sobre la manipulación de las palabras en los medios de comunicación y el discurso político. Muchos consideran que invita a la reflexión y es útil para comprender cómo el lenguaje influye en la opinión pública.

Los detractores señalaron que el libro puede ser ampuloso y pretencioso, y que a veces deriva en diatribas políticas en lugar de ceñirse al tema. Algunos opinan que es tendencioso, sobre todo en contra de ciertas figuras políticas, y que no explora a fondo la estructura de «Unspeak» como concepto. Algunos sugirieron que el contenido parecía anticuado o que el libro podría haber sido más breve y centrado.

(basado en 20 opiniones de lectores)

Título original:

Unspeak: How Words Become Weapons, How Weapons Become a Message, and How That Message Becomes Reality

Contenido del libro:

¿Qué tienen en común las frases «provida», «diseño inteligente» y «guerra contra el terrorismo»? Cada una de ellas es un nombre para algo que introduce de contrabando una opinión política muy cargada. Las palabras y frases que funcionan de esta forma especial reciben muchos nombres.

Algunos escritores las llaman «términos evaluativo-descriptivos». Otros hablan de «pantallas terminísticas» o discuten la forma en que se «enmarcan» los debates. El autor Steven Poole los llama Unspeak.

Unspeak representa un intento por parte de políticos, grupos de interés y corporaciones empresariales de decir algo sin decirlo, sin entrar en una discusión y tener así que justificarse. Al mismo tiempo, trata de desdramatizar -en el sentido de borrar o silenciar- cualquier posible punto de vista contrario, reivindicando desde el principio una única forma de ver un problema.

Recordando el vocabulario de 1984 de George Orwell, a medida que una frase Unspeak se convierte en un término ampliamente utilizado en el debate público, satura la mente con un punto de vista y, al mismo tiempo, hace cada vez más difícil enunciar un punto de vista opuesto. En este fascinante libro, Poole rastrea el Unspeak moderno y revela cómo la evolución del lenguaje cambia nuestra forma de pensar.