Un minuto después de morir (Paquete de 25)

Opiniones de los lectores

El libro aborda temas como la muerte, la vida después de la muerte y la distinción entre creyentes y no creyentes, y ofrece perspicaces interpretaciones de las enseñanzas bíblicas. Se considera una lectura estimulante y reconfortante que desafía las ideas preconcebidas sobre la vida después de la muerte. Aunque ofrece profundos conocimientos teológicos, algunos lectores señalaron pequeños desacuerdos teológicos.

Perspectivas sobre la vida, la muerte y el más allá que invitan a la reflexión y abren los ojos.

Reconfortante para los que están de duelo, proporcionando claridad sobre asuntos espirituales.

(basado en 494 opiniones de lectores)

Título original:

One Minute After You Die (Pack of 25)

Contenido del libro:

Un minuto después de morir estarás disfrutando de una bienvenida personal de Cristo o vislumbrando por primera vez la oscuridad como nunca la has conocido. En cualquier caso, tu futuro estará irrevocablemente fijado y será eternamente inmutable.

Los que se encuentren en el cielo estarán rodeados de muchos amigos que han conocido en la tierra. Todas las descripciones del cielo que hayan oído palidecerán a la luz de la realidad. Pero otros se encontrarán envueltos en tinieblas en una región de privaciones y lamentos interminables. Para ellos, la muerte será mucho peor de lo que jamás imaginaron.

Así que mientras los parientes y amigos planean tu funeral, estarás más vivo de lo que nunca has estado. O verás a Dios en Su trono rodeado de ángeles y de la humanidad redimida, o sentirás un peso indescriptible de culpa y abandono. No existe un destino intermedio entre estos extremos.

Inconsciente del Peligro

Una vez leí un trágico relato sobre gente que disfrutaba en los pisos superiores de un alto edificio de apartamentos sin saber que había un incendio en los pisos inferiores. Del mismo modo, muchas personas están disfrutando de la vida ahora, ignorando cómodamente el hecho de que su muerte no sólo es inevitable, sino que está mucho más cerca de lo que piensan. De hecho, este mundo y todo lo que hemos acumulado acabarán quemándose (2 Pedro 3:10).

No imagine ni por un momento que llegará al cielo sin las credenciales adecuadas. No estarás allí porque tu esposa tenga derecho a entrar. No estarás allí porque tienes un hijo que ya está allí. No, se trata de un asunto individual, y sólo se permitirá la entrada a quienes tengan las credenciales adecuadas.

Nuestro problema, por supuesto, es que Dios no nos aceptará según nuestras condiciones. No podemos llegar a las puertas del cielo esperando clemencia. "Está establecido que el hombre muera una sola vez, y después viene el juicio" (Hebreos 9:27). No podemos llegar suplicando favores especiales una vez que hayamos pasado de esta vida a la eternidad.

Nuestra única esperanza

Nuestra única esperanza es que Dios nos acredite la justa perfección que nunca podríamos alcanzar por nosotros mismos. Una vez acreditada esa justicia en nuestra cuenta, podemos entrar en el cielo inmediatamente después de la muerte, sin ni siquiera una parada intermedia. Como dice la Biblia, "lejos del cuerpo y en casa con el Señor" (2 Corintios 5:8).

He aquí cómo es posible: Cuando Cristo murió en la cruz, se ofreció a sí mismo como sacrificio por los pecadores, que Dios aceptó. "Por nosotros Dios hizo pecado a Cristo, que no conoció pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él" (2 Corintios 5:21). Aunque Cristo era perfecto, Dios lo hizo legalmente culpable de todos nuestros pecados. A su vez, los que creen que Cristo hizo esto por ellos reciben el crédito de su justicia ante Dios.

Cristo fue considerado pecador cuando tomó sobre sí nuestros pecados. A su vez, Dios nos considera santos cuando recibimos la justicia de Cristo. Dios tiene normas muy estrictas, pero gracias a Él, las cumple por nosotros mediante este asombroso intercambio. Es la única manera de que podamos entrar en el cielo de Dios.

Una nueva naturaleza

Cuando recibimos la justicia de Cristo, Dios también cambia toda nuestra perspectiva. Cristo dijo: "El que no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios" (Juan 3:3). Entonces, ¿cómo podemos recibir el don de la justicia y "nacer de nuevo"?

La respuesta es admitir nuestra impotencia y pecaminosidad ante Dios, y reconocer que dependemos de su misericordia. Debemos cambiar completamente de opinión sobre lo que creíamos que nos haría aceptables a Dios. En su lugar, debemos transferir toda nuestra confianza a Cristo como nuestro portador del pecado. Debemos creer en El como Aquel que hizo todo lo que necesitamos para estar en la santa presencia de Dios. Creer en Cristo" significa que, como mejor sabemos, confiamos sólo en Él para todo lo que necesitamos para agradar a Dios en esta vida y para vivir con Él para siempre en el cielo.

Esta es una oración que usted puede usar si desea transferir su confianza sólo a Cristo para su salvación eterna. Si oras con fe, Dios te recibirá.

Querido Dios, sé que soy pecador y que no puedo hacer nada para salvarme. Confieso mi total impotencia para perdonar mis propios pecados o para abrirme camino hacia el cielo. En este momento confío sólo en Cristo como Aquel que asumió todos mis pecados cuando murió en la cruz. Creo que él hizo todo lo necesario para que yo pueda vivir algún día en tu santa presencia.

Te doy gracias porque Cristo resucitó de entre los muertos. De la mejor manera que sé, le transfiero mi confianza. Te agradezco que hayas prometido recibirme a pesar de mis muchos pecados y fracasos. Padre, te tomo la palabra. Te doy gracias porque puedo enfrentarme a la muerte ahora que Cristo es mi Salvador. Gracias por la seguridad de que caminarás conmigo a través de la puerta de la muerte. Gracias por escuchar mi oración. En el nombre de Jesús, amén".

¿Dónde estarás... un minuto después de morir?