Trenes de alta velocidad al norte de Inglaterra

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Título original:

High Speed Trains to the North of England

Contenido del libro:

Desde que tenemos memoria, la tracción a vapor ha sido la reina de nuestros ferrocarriles. El sonoro latido de los tubos de escape de los diseños clásicos de Gresley, Stanier, Collett, Bulleid y muchos otros nos había entusiasmado a todos, mientras que otros «caballos de batalla» menos prestigiosos habían mantenido en movimiento a viajeros y mercancías a lo largo de una vasta red de rutas principales y secundarias. Los poderosos diésel los sustituyeron, en particular los emblemáticos Deltic de la clase 55, que establecieron nuevos estándares de velocidad y eficiencia en la East Coast Main Line.

La electrificación se convirtió en la palabra de moda a medida que aumentaba la necesidad de velocidad e impulsaba la planificación ferroviaria a un nuevo nivel. A mediados de los años setenta se instalaron los cables en la línea principal de la costa oeste y, aunque otras rutas exprés acabarían siguiéndole, se sentaron las bases para el desarrollo y la introducción de un modo alternativo de tracción para las líneas principales aún no electrificadas, basado en el concepto de una potente locomotora diésel en cada extremo de una fila de vagones de nuevo diseño.

Así se concibió el Tren Diesel de Alta Velocidad. Elegante y estilizado. Un diseño moderno para una nueva era del transporte ferroviario. Capaz de circular a velocidades de hasta 201 km/h, fue un éxito inmediato y sigue prestando un servicio ininterrumpido cuarenta años después. Un testimonio de su resistencia.

Esta es la historia del arquetipo de tren exprés diésel: el Inter City 125.