SuicideGirls Geekología

Opiniones de los lectores

El libro ha recibido críticas variadas de los lectores, que aprecian su calidad y el enfoque artístico con que presenta a las SuicideGirls, pero algunos consideran que le falta profundidad y cohesión.

Producción de alta calidad con buen papel, impresión y encuadernación. Presenta una variedad de modelos en fotos relajadas y artísticas. Ofrece una visión de la personalidad de las modelos, lo que la convierte en un buen tema de conversación para los aficionados. Celebra la individualidad y la belleza no convencional, lo que atrae a los aficionados a la estética alternativa.

Carece de información detallada sobre las modelos, por lo que algunos lo consideran más un catálogo que un libro de arte. Algunos consideran que la calidad de la fotografía es básica y que la disposición de las imágenes puede ser desorganizada. Varios lectores expresaron su decepción con la cantidad de contenido escrito, por considerarlo insuficiente o decepcionante, y algunos críticos mencionaron problemas con el estado en que llegó el libro.

(basado en 52 opiniones de lectores)

Título original:

SuicideGirls: Geekology

Contenido del libro:

Las SuicideGirls son una colección de más de 2.500 chicas pin-up dedicadas a cambiar tu idea de lo que hace bella a una mujer... y están desnudas.

Creadas en Portland, Oregón, por Missy Suicide y sus amigas en 2001, las SuicideGirls rompieron las nociones convencionales de belleza y del ideal de chica pin-up tal y como lo definen las revistas para hombres y mujeres y la cultura en general. Esta vez, «SuicideGirls no está redefiniendo lo que significa ser guapa o lo que significa ser friki. Celebran el hecho de que siempre han estado aquí, siempre han sido frikis y siempre han sido guapas».

«SuicideGirls: Geekology» centra la atención en las autoproclamadas geeks de la población de SuicideGirls: las jugadoras de videojuegos, las lectoras de cómics, las Trekkies y muchos otros brillantes ejemplos de la cultura que celebran. Hay algo realmente maravilloso en este libro.

Hay algo hermoso en la idea de mostrar a las chicas frikis en todo su esplendor: ir más allá de las fotos y descubrir que, para nosotras, cada parte de la imagen significa algo. Descubrir cuántas horas dedicamos a diseñar nuestro cosplay y lo atentas que estamos a los homenajes que creamos. No nos limitamos a jugar a disfrazarnos en un mundo del que no sabemos nada.

Estábamos allí mismo, ayudando a crear popularidad desde la base: los primeros de la fila, el número uno. Antaño una subcultura de una subcultura, las mujeres son ahora toda una fuerza en la comunidad friki.