Sur la science
La humanidad comenzó, como comienza todo ser humano, sin poseer más conocimientos que la conciencia de sí misma y la percepción del mundo.
Esto le bastaba, como sigue bastando a los pueblos salvajes o, entre nosotros, a los trabajadores ignorantes, para saber desenvolverse en la naturaleza y entre los hombres lo necesario para vivir. ¿Para qué querríamos más? Parece que la humanidad nunca hubiera tenido que salir de esta dichosa ignorancia, ni, citando a Jean-Jacques, depravarse hasta la meditación.
Pero esta ignorancia es un hecho del que, por lo que sabemos, la humanidad nunca ha tenido necesidad de escapar, porque nunca se ha encerrado en ella...
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)