Siéntate, levántate, muévete

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Título original:

Sit Up - Stand Up - Move Up

Contenido del libro:

Siéntate: No dejes que el entorno ni el mundo que te rodea te aprieten en su propio molde, sino deja que Dios vuelva a moldear tu mente desde dentro. Derrama tu corazón a Dios Dios viene a ti en la tormenta.

Hoy en día, en este país es difícil pensar a largo plazo porque todo en nuestra sociedad enseña a hacer lo contrario. Levántate: Sin una visión clara, muchas veces perdemos la esperanza. Cuando uno no tiene una visión para su vida, es mucho más fácil perder la esperanza.

Desarrolla una visión para tu vida.

Desarrolla el coraje para hacer lo que hay que hacer para alcanzar las metas, los objetivos, la visión de la vida. La vida se encoge o se expande en proporción al coraje de cada uno.

El coraje es como los músculos: cuanto más lo usas, más fuerte se vuelve. En este contexto, el valor consiste en tener un propósito en la vida y un corazón. Incluso con valor, es posible que tengas que volver a intentarlo mañana, la semana que viene o incluso el mes que viene.

Algunas formas en las que puedes mantener un largo viaje incluyen una mentalidad eterna a lo largo del día. Pensar a corto plazo te impide ver con claridad. Ascender: La actitud puede significar la diferencia entre un ascenso o un descenso.

La actitud es un sentimiento interior que se expresa en el comportamiento. Las acciones exteriores se convierten en una ventana al alma.

No podemos viajar dentro y quedarnos quietos fuera. Las raíces de la actitud vienen de dentro, pero el fruto está fuera. La actitud es la fuerza principal que determina si tenemos éxito o fracasamos.

En la Biblia dice: 'Somos más que vencedores por Dios que nos ama'.

Queremos progresar si podemos hacerlo sin cambiar. Cuando has terminado de cambiar, has terminado. El escritor creció en el sur profundo de América en los años cincuenta y sesenta.

Creció en una zona boscosa. En esa epoca no habia preescolar. Cuando cumplió seis años, entró en una escuela primaria el primer grado.

La escuela en ese momento no se había integrado. Jugaba al fútbol y hacía atletismo. Durante este tiempo los estudiantes no daban sus opiniones respecto a lo que el profesor o los principios les decían que hacer y decir.

Los padres, los profesores y la iglesia le disciplinaron mucho durante su infancia.