La saliva es un fluido bucal muy valioso. Sirve como fuente de información fácil de recoger y no invasiva.
Se sigue demostrando que es más compleja de lo que generalmente se percibe y que tiene más valor diagnóstico de lo que generalmente se aprecia. Se están llevando a cabo numerosas investigaciones sobre los componentes y las funciones de la saliva para el diagnóstico, el tratamiento y la prevención de enfermedades locales y sistémicas. La odontología debería apoyar el desarrollo y la promoción de la saliva como ventana al bienestar y como medio para el diagnóstico precoz y la prevención de enfermedades.
Independientemente de que la saliva se produzca en cantidades tan grandes o pequeñas, deben reconocerse las numerosas contribuciones que hace a la preservación y el mantenimiento de la salud bucodental y sistémica. La ingeniería de tejidos influirá significativamente en la práctica odontológica en los próximos 25 años y la práctica clínica odontológica en 2025 será sin duda diferente.
De ahí el valor de la saliva para la humanidad. Se ampliará durante los próximos años a medida que más estudiosos, educadores y profesionales sanitarios lleguen a apreciar su fascinante mundo.
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)