Rasputín: el santo que pecó

Opiniones de los lectores

Las reseñas del libro sobre Grigori Rasputin revelan una mezcla de aprecio por la minuciosa investigación y el estilo narrativo, junto con críticas sobre su sensacionalismo y las inexactitudes percibidas en la descripción histórica. El retrato que hace Moynahan de Rasputín como una figura compleja en el contexto de la Rusia zarista resuena entre algunos lectores, mientras que otros consideran que el texto es árido o demasiado adornado.

Los lectores elogian la profunda investigación, la atractiva narración y el vívido retrato de Rasputín y del contexto histórico de la Rusia zarista. El libro ha sido descrito como convincente, un apasionante libro que sumerge a los lectores en las vidas de los personajes históricos, haciéndolos cercanos. Ofrece nuevas perspectivas, así como una descripción descarnada y poco romántica del carácter de Rasputín.

Las críticas incluyen un estilo de escritura que algunos consideran seco o excesivamente sensacionalista, lo que puede distraer de los hechos históricos. Se mencionan inexactitudes sobre la vida de Rasputín y la representación de la monarquía rusa, y se afirma que el libro está lleno de cotilleos más que de un análisis histórico riguroso. Algunos lectores opinan que el libro carece de matices y puede ser tendencioso en contra de ciertos personajes.

(basado en 22 opiniones de lectores)

Título original:

Rasputin: The Saint Who Sinned

Contenido del libro:

Grigori Efimovich Rasputín -bebedor, ladrón, mujeriego- llegó a San Petersburgo en 1903 como procedente del pasado medieval... andrajoso, vestido de negro, murmurando.

En el momento de su sensacional asesinato, trece años más tarde, el campesino era el «querido amigo» del zar Nicolás y la emperatriz Alexandra, con un poder aparentemente sobrenatural para detener los ataques de hemorragia de su hijo hemofílico, Alexis. ¿Cómo pudo suceder? Como se preguntaba una dama de sociedad de la época: «¿Cómo pudo un desgraciado arrojar una sombra tan vasta? «Basándose en informes policiales confidenciales, memorandos de reuniones de gabinete y muchos documentos de los que sólo ahora se dispone, Moynahan arroja nueva luz sobre la vida de Rasputín y rebate algunos de los detalles ampliamente difundidos sobre su muerte.

El Washington Post Book World calificó el libro de «equilibrado y bien documentado» y elogió su «sagaz análisis de las formas en que las habilidades manipuladoras de Rasputín se mezclaban con las necesidades emocionales de los aislados y supersticiosos miembros de la aristocracia zarista. Es un retrato inolvidable tanto de una época como de un hombre».