¿Qué es importante en los estudios de yoga? Género, salud y consumo transcultural

Título original:

What is Important Yoga Studies?: Gender, Health and Cross-Cultural Consumption

Contenido del libro:

¿Quién practica yoga en Norteamérica? ¿Por qué son tantas las mujeres blancas sin discapacidades? Esta etnografía feminista multisituada de las comunidades contemporáneas de yoga en Norteamérica representa mi exploración de las desigualdades en el mundo del yoga. A través de conversaciones sobre cómo experimentamos nuestros cuerpos, nuestras habilidades, ubicaciones sociales, y las formas en que aprendemos unos de otros como estudiantes y profesores de yoga en los espacios donde aprendemos y enseñamos yoga, esta tesis plantea preguntas sobre la inclusión y la exclusión, sobre la normatividad del cuerpo, y sobre la autenticidad.

El yoga es un campo ideal para la erudición feminista porque ofrece una lente a través de la cual examinar y potencialmente cambiar las desigualdades que se entrecruzan no sólo en el estudio de yoga, sino también en el entorno de la salud y el fitness. Antes de que el yoga se convirtiera en un tema de debate para los estudiosos, la gente lo practicaba como una práctica exótica de salud y espiritualidad. A principios de la década de 2000, el yoga se convirtió en algo de consumo público, con sus pantalones de lujo Lululemon y sus salvajes festivales de yoga en las montañas, hasta el yoga de chocolate, el yoga para hombres y el yoga de la rabia.

En el siglo XX, el yoga era una actividad de la subcultura, del tipo que se conocía comúnmente por atraer a hippies de granola crujiente y exploradores espirituales que habían reinventado el yoga para sus propios fines. En las dos últimas décadas, la explosión de popularidad del yoga me ha llevado a preguntarme cómo ha cambiado el significado del yoga como práctica espiritual, pasando de la subcultura a la corriente dominante de salud y forma física.