Pintura ampliada: Estética ontológica y esencia del color

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Título original:

Expanded Painting: Ontological Aesthetics and the Essence of Colour

Contenido del libro:

La relevancia de la pintura se ha cuestionado muchas veces a lo largo del último siglo, con la llegada de la fotografía, el arte de instalación y las tecnologías digitales. Pero en lugar de aceptar la muerte de la pintura, Mark Titmarsh traza una interfaz paradójica entre esta forma de arte y sus fuerzas opuestas para definir una nueva práctica conocida como «pintura expandida», dotando al término de contexto histórico, estructura teórica y un lugar importante en la práctica contemporánea.

Al derrumbarse los límites formales, el ser de la pintura se expande hasta convertirse en una especie de arte total que incorpora todos los demás medios, incluidos la escultura, el vídeo y la performance. La pintura se considera desde tres perspectivas diferentes: la etnología, la teoría del arte y la ontología. Desde el punto de vista etnológico, la pintura es una de las muchas actividades que tienen lugar en una cultura.

Desde el punto de vista de la teoría del arte, se entiende que la pintura produce objetos de interés para las disciplinas humanísticas. Sin embargo, la pintura como medio a menudo desafía tanto su condición de objeto como de imagen, «expandiéndose» y creando obras híbridas entre la pintura, los objetos, los medios de pantalla y el texto.

Ontológicamente, la pintura se entiende como un objeto de discurso estético que a su vez refleja estados históricos del ser. Así pues, Expanded Painting ofrece un nuevo tipo de decir, un discurso postestético que sintoniza con una extraña tensión entre la presencia y la ausencia de la pintura.