Off the Record: Tecnología y cultura de la grabación de sonido en América

Título original:

Off the Record: The Technology & Culture of Sound Recording in America

Contenido del libro:

Mejor investigación en la historia general del sonido grabado de la Asociación de Colecciones de Sonido Grabado.

David L. Morton examina el proceso de invención, innovación y difusión de la tecnología de las comunicaciones, centrándose en la historia de la grabación sonora. Off the Record demuestra que la historia tanto del hardware como de las formas en que la gente lo utilizaba es esencial para entender por qué una tecnología concreta se convirtió en un elemento fijo de la vida cotidiana o se desvaneció en el olvido. El enfoque que Morton da al tema difiere de la mayoría de los trabajos anteriores, que han examinado el impacto social de la tecnología, pero no las razones de su existencia. Según Morton, la cultura de la grabación en Estados Unidos no surgió de los dictados de la propia tecnología, sino de formas complejas que dependían de las acciones de los usuarios.

Cada uno de los estudios de caso del libro hace hincapié en uno de los cinco aspectos de la cultura de la grabación y su relación con la nueva tecnología, al tiempo que narra la historia de la grabación sonora. Uno de los conceptos erróneos que Morton pretende disipar es que la única categoría importante de la grabación sonora es la música. Únicos en su amplio enfoque de la tecnología del sonido, los cinco casos de estudio que investiga Morton son:

⬤ El disco fonográfico.

⬤ La grabación en la radio.

⬤ El dictáfono.

⬤ El contestador automático.

⬤ La grabación casera.

Los lectores aprenderán, por ejemplo, que el equipo para crear el contestador automático existe desde hace un siglo, pero que la propiedad y el uso de los contestadores automáticos fue un tema muy controvertido en la industria telefónica a principios de siglo, lo que sofocó su desarrollo comercial durante décadas. Morton también ofrece una visión fascinante de los primeros tiempos de la radio: aunque al principio The Amos and Andy Show se pregrababa y no se emitía en directo, las emisoras comerciales vieron en este programa de fácil distribución una amenaza económica: muchas emisoras que no pertenecían a la red podían comprar los discos para reproducirlos de forma fácil y relativamente barata. Como resultado, Amos y Andy fue vendido a Mutual y pasó a emitirse en directo poco después.