Miedo en el Mundo: Alvaro Corrado

Título original:

Fear in the World: Alvaro Corrado

Contenido del libro:

El miedo en el mundo, de Corrado Alvaro, se publicó una década antes que 1984, de Orwell, pero no es muy conocida fuera de Italia, quizá por el momento en que se publicó, justo antes de la Segunda Guerra Mundial.

Álvaro había visitado la Unión Soviética como periodista, pero probablemente se sintió motivado para escribir esta novela distópica por aspectos de la modernidad que le preocupaban, en particular el uso del miedo con fines políticos, que no sólo afectaba a Rusia. Le interesaba la psicología del miedo y hasta qué punto los individuos y la multitud participan en su propia regimentación. Nunca se mencionan los nombres de países, ciudades y figuras políticas destacadas, como Stalin, pero, al igual que en las obras de Orwell, son claramente identificables por sus descripciones: el autor escribía en un país fascista contra un censor fascista y tenía que cortar por lo sano.

Es una novela oscura, no tanto como 1984, pero sí más claustrofóbica. La sensación de inevitabilidad está presente desde la primera página, y se experimenta como experimentamos la vida real. La verdad imaginada nos acerca a donde estamos realmente. Los sinsabores de la relación amorosa que constituye el núcleo de esta novela surgen muy posiblemente de percepciones que el régimen explota de manera bastante ad hoc. Y conduce al lector a través de una extraordinaria secuencia de acontecimientos y observaciones que abarcan una vasta gama de emociones e ideas expresadas en un estilo de prosa único. El Leviatán moderno parece una máquina bien engrasada, pero hacia el final queda claro que se trata de una mera apariencia de eficacia y omnisciencia, pero las apariencias pueden ser poderosas.

A Álvaro le interesa especialmente cómo el Estado utiliza mecanismos y rituales cuasireligiosos para afirmar su poder. El personaje central regresa al país tras un largo periodo en el extranjero, y ve las cosas inicialmente con ojos extranjeros, viviendo una vida similar a la que Álvaro llevaba cuando estaba en Rusia. No es un rebelde nato, y tiene muchas ganas de encajar, pero le resulta difícil conseguirlo. El régimen se jacta de tener un aliado en la historia, pero el destino es esquivo, por mucho que los personajes se sientan impulsados por él.