Micronesios en movimiento: hacia el este y hacia arriba

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Título original:

Micronesians on the Move: Eastward and Upward Bound

Contenido del libro:

¿Es el aumento de la emigración prueba del fracaso de una nación insular del Pacífico a la hora de cumplir su promesa económica y proporcionar los puestos de trabajo que sus ciudadanos buscan en una sociedad modernizada? ¿O es una estrategia de desarrollo alternativa legítima que depende de la exportación del excedente de mano de obra en lugar de los métodos más convencionales recomendados por las naciones donantes y las instituciones financieras internacionales? En este informe, Francis X. Hezel, SJ, arroja luz sobre estas cuestiones repasando los 30 años de historia de la emigración de una nación insular del Pacífico, los Estados Federados de Micronesia (EFM), y examinando la situación actual de sus emigrantes.

Hezel informa de que, aunque la emigración de los EFM comenzó en pequeñas cantidades en 1980, se intensificó cuando entró en vigor el Pacto de Libre Asociación en 1986. A cambio de un acceso estratégico exclusivo por parte de Estados Unidos, el Pacto concedía a los ciudadanos de los EFM entrada libre en Estados Unidos y sus territorios para establecer su residencia y trabajar. Este informe traza el crecimiento de las primeras comunidades micronesias en Guam y Saipán, y la posterior migración hacia el este, a Hawai y al territorio continental de Estados Unidos.

En la actualidad, un tercio de los nacidos en los Estados Federados de Micronesia vive fuera del país. Hezel presenta los resultados de una innovadora encuesta realizada en 2012 entre emigrantes micronesios, que muestra que un segmento cada vez mayor de la población emigrante está echando raíces en el territorio continental de Estados Unidos.

Allí, a pesar de las dificultades que encuentran, estas personas y familias pueden encontrar empleos más abundantes, un coste de la vida reducido y un entorno sin algunos de los estereotipos negativos que atenazan a sus compañeros emigrantes en Guam y Hawai. Hezel hace un seguimiento de los cambios en sus condiciones de vida y demuestra que, incluso si la emigración micronesia continúa al mismo ritmo que en el pasado, está claro que las condiciones de vida de estos ciudadanos de los Estados Federados de Micronesia están mejorando, al igual que sus posibles contribuciones a la sociedad estadounidense y a sus amigos y familiares en su país de origen.