Mi granuja en ruinas

Opiniones de los lectores

My Rogue to Ruin es la cuarta entrega de la serie Wild Wynchesters de Erica Ridley, protagonizada por Marjorie, una artista de talento, y Adrian, un falsificador incomprendido. La historia sigue su aventura para detener el dinero falso que circula en su comunidad, mostrando temas de familia, amor y el viaje del autodescubrimiento. Aunque el libro ofrece humor y una dinámica de personajes atractiva, algunos lectores opinaron que el ritmo era variable y que algunos elementos podrían haberse mejorado.

El libro cuenta con un encantador conjunto de personajes y humor, proporcionando una divertida experiencia de lectura. Los lectores disfrutaron con el desarrollo del carácter de Marjorie y su liderazgo en el atraco. Se alabó la tensión romántica entre Marjorie y Adrian, que resulta atractiva para los aficionados al género romántico. La serie destaca por su colorida dinámica familiar y sus entretenidas tramas, así como por la representación positiva de la discapacidad.

Algunos lectores consideraron que el comienzo era lento y rebuscado, sobre todo en las escenas de amor. Algunos opinaron que el epílogo y algunas partes del diálogo se alargaban demasiado. Hubo opiniones encontradas sobre el ritmo y algunos opinaron que el libro podría beneficiarse de una edición más ajustada, sobre todo en la segunda mitad. Aunque puede leerse de forma independiente, los lectores que no estén familiarizados con los libros anteriores podrían perderse algunos matices.

(basado en 118 opiniones de lectores)

Título original:

My Rogue to Ruin

Contenido del libro:

La alborotada familia Wynchester ha emprendido un nuevo caso para desenmascarar a un falsificador, pero el principal sospechoso no es en absoluto lo que parece en esta cautivadora aventura de Regencia de una autora superventas del New York Times.

Marjorie Wynchester siempre ha dejado que sus hermanos lleven la voz cantante a la hora de planear sus investigaciones. Pero alguien en Londres está tratando de hacer pasar falsificaciones, y esta vez ella es la única con la habilidad necesaria para encontrar al culpable. Pronto, todas las pruebas la conducen directamente a Lord Adrian Webb.

Adrian es un pícaro sinvergüenza de primer orden, pero nunca quiso verse envuelto en una trama de falsificación. Y menos en una que se ha descontrolado. Ahora, un chantajista quiere arruinarle y la mujer más seductora que ha conocido nunca intenta meterle entre rejas.

Cada vez que Marjorie cree que ha descubierto a Adrian, sus suposiciones se vuelven en su contra. Es un canalla sin corazón. Un hermano leal. Un buen mentiroso. Un buen besador. Er... espera... ¿Ganar su afecto es sólo un intento más de evitar la ley? ¿O es posible que no sea un granuja después de todo?