Materia y Luz - La Nueva Física

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Título original:

Matter and Light - The New Physics

Contenido del libro:

LA amable insistencia de mi amigo Andr George me ha inducido a reunir en el presente volumen una serie de Estudios sobre Física contemporánea escritos tanto desde el punto de vista general como desde el más metafísico. Cada uno de estos Estudios forma un todo independiente y puede leerse por sí mismo.

En más de una ocasión me he visto obligado a duplicar un resumen de las grandes etapas fundamentales de la Física contemporánea, tales como la clasificación de las sustancias simples, la investigación del efecto fotoeléctrico y el origen de la teoría de los cuantos de luz y de la mecánica ondulatoria. Sin embargo, aunque en varios de estos Estudios se trata del mismo tema, en cada uno de ellos he tratado de adoptar un punto de vista diferente, y me he esforzado por arrojar luz sobre distintos aspectos de los problemas esenciales de la Física Cuántica, a fin de facilitar la comprensión de su importancia. Al comparar los distintos capítulos, el lector observará que, aunque se solapan, también se complementan; y sentirá la fascinación y la grandeza inherentes a la vasta estructura de la Física moderna.

Y admirando el gran número y la extrema delicadeza de los hechos experimentales que los físicos de laboratorio han logrado revelar, y los extraños y brillantes conceptos concebidos por los teóricos para explicarlos, apreciará hasta qué punto los métodos y las ideas de los físicos han crecido en sutileza durante los últimos años, y cuán grande ha sido el progreso desde el Realismo un tanto ingenuo y la Mecánica excesivamente simplificada de los pensadores anteriores. Cuanto más nos adentramos en las estructuras más minúsculas de la materia, más claramente vemos que los conceptos desarrollados por la mente en el curso de la experiencia cotidiana -especialmente los de tiempo y espacio- deben fallarnos en el intento de describir los nuevos mundos en los que estamos entrando.

Uno se siente tentado a decir que los contornos de nuestros conceptos deben sufrir una progresiva difuminación, para que puedan conservar alguna apariencia de relevancia para las realidades de las escalas subatómicas. El tiempo y el espacio, en otras palabras, son un vestido demasiado holgado para las entidades elementales; la individualidad se atenúa en los misteriosos procesos de interacción, e incluso el determinismo, el favorito de una vieja generación de físicos, se ve obligado a ceder.

Pero el gran libro de la Ciencia nunca está acabado: nos aguardan otras sorpresas: ¿quién sabe qué misterios se esconden en el núcleo de un átomo, que, aunque sea un millón de millones de veces más pequeño que el más pequeño de los seres vivos, es sin embargo un universo en sí mismo?