Mateo, Marcos, Lucas, Juan... y yo: Crecer judío en un mundo cristiano

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Título original:

Matthew, Mark, Luke, John...and Me: Growing Up Jewish in a Christian World

Contenido del libro:

Con estas memorias que invitan a la reflexión, Arthur D. Ullian desmitifica las raíces del antisemitismo y llama a las personas de todas las religiones a encontrar un camino de sanación.

Basándose en un reciente informe de la Iglesia de Inglaterra, en una declaración del Papa Francisco y en la directiva de Jesús "Ama a tu prójimo", el libro se sitúa en el contexto actual de aumento del odio de extrema derecha y de los efectos devastadores de la pandemia mundial. En estas memorias, Ullian cuenta la historia de ser el único judío en una escuela preparatoria a las afueras de Boston, siendo objeto de muchas amonestaciones desde el púlpito durante los servicios semanales en la capilla a los que todos los estudiantes estaban obligados a asistir. Escuchar a los Evangelios acusar a los judíos de cometer el peor de los crímenes le llevó a pasar años investigando la historia sólo para descubrir que los hechos descritos no podían haber sucedido.

Años más tarde, a consecuencia de un accidente de bicicleta que le postró en una silla de ruedas, fue a Washington y se convirtió en miembro del Consejo Asesor del Director de los Institutos Nacionales de Salud y presionó al Congreso para duplicar la financiación de los NIH en 14.000 millones de dólares anuales.

Más de veinte años después, esa financiación permitió descubrir la vacuna Covid-19 en diez meses. Este proyecto, en el que médicos, científicos, trabajadores sanitarios de todos los colores, razas y creencias religiosas trabajaron juntos por el bien de todos nosotros, es un ejemplo del concepto judío de Tikun Olam, o "Reparar el mundo." En un esfuerzo por sanar el mundo a su manera, el Papa Francisco ha proclamado: "Nunca me cansaré de condenar toda forma de antisemitismo." Poniendo el pensamiento en acción, La Iglesia de Inglaterra ha reevaluado el papel de sus textos sagrados, oraciones e himnos en la propagación del antisemitismo.

En la introducción de un informe de 2019 encargado por el arzobispo de Canterbury, God's Unfailing Word, se afirma que "los cristianos han sido culpables de promover y fomentar estereotipos negativos del pueblo judío que han contribuido a graves sufrimientos e injusticias. Tienen el deber de estar alerta ante... esos estereotipos y de oponerse a ellos.

Demasiadas veces en la historia la Iglesia ha sido responsable y cómplice del antisemitismo". "Esta gratificante admisión de la Iglesia de Inglaterra sugiere que los judíos pueden abrir diálogos con organizaciones cristianas y con los departamentos de religión e historia de nuestros colegios y universidades", dice Ullian. "Las historias bíblicas que nos tergiversaron para servir a una agenda política están muy arraigadas en la sociedad.

Pero si esas historias se pueden volver a contar en su contexto, la próxima generación podría empezar a ver las cosas de otra manera".