Los orígenes del Nuevo Testamento

Título original:

The Origins of the New Testament

Contenido del libro:

Alrededor del año 180 d.C., se hizo necesario un canon bíblico para la supervivencia de la Iglesia. Las serias amenazas gnósticas ya tenían evangelios propios, como Marción, Valentín y Basílides.

Alfred Loisy muestra cómo se elaboró el canon y cómo evolucionó a partir de ahí. Fue un respetado sacerdote católico romano en Francia hasta la edad de 51 años, por lo que pocos pueden igualar sus conocimientos sobre este tema. Sin embargo, fue excomulgado en 1908, por haber sido líder de un movimiento conocido como «modernismo católico».

Creían que la verdad no podía cambiarse, pero sí las representaciones de esta verdad, como hizo la Iglesia en algunas áreas. Creían que la doctrina no es lo mismo que la historia, y por eso Loisy escribió este libro.

Algunos pueden afirmar que fue escrito en respuesta a su expulsión, pero más bien le liberó para compartir la investigación que había encontrado. El objetivo del libro es trazar la evolución progresiva del Nuevo Testamento y, según el autor, mostrar cómo la formación de la literatura «estuvo condicionada por la evolución de la propaganda cristiana.» Loisy era ante todo un cristiano, que consideraba el Nuevo Testamento un gran logro de la humanidad, pero critica la cadena de milagros que retrata. Como el Nuevo Testamento es espiritual en esencia, nos ha hecho creer erróneamente en el mundo moderno que ciertos «acontecimientos» sobrenaturales desempeñaron un papel real en la historia.

Afirma que algunas adiciones posteriores fueron requeridas por «las necesidades del momento», y examina de cerca el trabajo de los editores en cada evangelio. Este erudito trabajo fue escrito para complementar su otro libro, El nacimiento de la religión cristiana, también reeditado por The Book Tree.