Llorar en el baño: Unas memorias

Opiniones de los lectores

Crying in the Bathroom, de Erika L. Sánchez, es un libro de memorias que narra sus experiencias como chicana, sus problemas de salud mental y sus esfuerzos por convertirse en escritora. El libro combina el humor con una profunda comprensión emocional, abordando temas que resuenan en muchos lectores, especialmente en las mujeres latinas. Aunque recibe elogios por su autenticidad y cercanía, algunos lectores encuentran algunas partes serpenteantes o demasiado serias.

Las memorias están bien escritas y captan las complejidades de la feminidad y la salud mental con humor. Resuena con muchos lectores, sobre todo con los que comparten experiencias o antecedentes similares. La honestidad y la crudeza emocional de la autora permiten a los lectores conectar profundamente con su viaje. A muchos les pareció catártico y cercano, y celebraron sus reflexiones sobre la cultura latina y los problemas de salud mental.

Algunos lectores sintieron que el libro divagaba y perdía el foco, con secciones que no eran atractivas o humorísticas como se pretendía. Algunos consideraron que el tono era demasiado serio y señalaron que el humor no siempre caía como se esperaba. También se criticó la profundidad de ciertos temas, como las relaciones personales de la autora, por considerar que se pasaban por alto en lugar de explorarse en detalle. Además, el uso del humor puede resultar polarizador, ya que algunos lo consideran inapropiado en ocasiones.

(basado en 43 opiniones de lectores)

Título original:

Crying in the Bathroom: A Memoir

Contenido del libro:

«A partes iguales, hilaridad a raudales y patetismo conmovedor, como la cita perfecta para un brunch que no quieres que acabe nunca. «--America Ferrera, actriz ganadora de un Emmy por Ugly Betty.

De la autora del bestseller del New York Times No soy tu perfecta hija mexicana, unas memorias en forma de ensayo totalmente originales, tan conmovedoras como hilarantes.

Al crecer como hija de inmigrantes mexicanos en Chicago en los años noventa, Erika Sánchez se describía a sí misma como una paria, una inadaptada y una decepción: una alborotadora melancólica y malhablada que se pintaba las uñas de negro pero a la que también le encantaba la comedia, a menudo riéndose tanto con sus amigos que tenía que abandonar el aula. Veinticinco años después, es una novelista, poeta y ensayista galardonada, pero sigue teniendo una risa incontenible, un ingenio mordaz y un singular poder de percepción del mundo que la rodea.

En estos ensayos, Sánchez escribe sobre todo tipo de temas, desde el sexo hasta el feminismo blanco y la depresión debilitante, revelando una vida interior rica en ideas, autoconciencia y percepción. Desgarrador, perspicaz, sin disculpas y brutalmente honesto, Llorar en el baño es Sánchez en su mejor momento, un libro que te hará sentir ese subidón post-confesional que viene de hablar durante horas con tu mejor amiga.