Driving a Cat to Portugal and Building a House When We Get There
Mientras esperábamos para embarcar en un avión para nuestras vacaciones anuales, mi mujer y yo intercambiamos unas palabras.
Yo: '¿Dónde está Faro? '.
Esposa: «Portugal».
No sabíamos que aquella fugaz conversación sentaría las bases de nuestro futuro. Pronto, el encanto de Portugal no sólo inspiraría nuestro próximo destino de vacaciones, sino que nos invitaría a transformar un capricho pasajero en un domicilio permanente en las soleadas colinas de So Brs de Alportel.
En medio de nuestras grandes decisiones vitales, las risas, los ceños fruncidos, los altibajos, Marli (nuestra querida gata, propensa a marearse en el coche) ocupa un lugar central. Desde sus primeros años en Slaithwaite (Huddersfield, Reino Unido) hasta su soleada jubilación en Portugal, el viaje de Marli refleja el nuestro, del idealismo al realismo (con paradas en Bafflement, Bliss, Disappointment y Delight).
Siga nuestra historia desde los caprichosos sueños de una noche de cita hasta los pasos concretos de la compra de un terreno y la construcción de una casa en un país extranjero. No se trata sólo de un traslado, sino de una exploración sincera y humorística del amor, la esperanza, los retos y la imprevisibilidad de la vida.
Teníamos un sueño, nos teníamos el uno al otro y teníamos a Marli.
¿Qué podía salir mal?
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Última modificación: 2024.11.14 07:32 (GMT)