Libro conmemorativo de Biala Podlaska

Título original:

Memorial Book of Biala Podlaska

Contenido del libro:

Este extenso libro conmemorativo Yizkor, que narra de forma épica el ascenso y la ruina final de la comunidad judía de Biala Podlaska, traza el caótico viaje de la ciudad a través de la historia. Fundada a finales del siglo XV en el estado lituano, se trasladó posteriormente entre Polonia y Austria a principios del siglo XIX, y finalmente se desplazó entre Rusia, Alemania y de nuevo a Polonia en los años cercanos a las Guerras Mundiales.

Ya en 1621 había pruebas de un asentamiento judío bien establecido de unas 30 familias en Biala. Desde el principio hubo conflictos entre las poblaciones cristiana y judía en torno a los derechos de vivienda, el comercio, el empleo y los impuestos, batallas que durarían generaciones.

Limitados por su profesión, los judíos de Biala eran comerciantes, principalmente sastres y fabricantes de gorras, pero también encajeros, orfebres, encuadernadores, metalúrgicos y carniceros. No tenían ninguna influencia en la administración de la ciudad. Su vida se centraba en el patio del rabino, en las casas de oración jasídica y en los negocios comerciales con los terratenientes de los alrededores.

A finales del siglo XIX empezaron a notarse cambios en la vida judía. Un sector de la juventud judía empezó a estudiar en secreto temas mundanos y se inició una disputa con el círculo religioso. Durante la ocupación alemana de la Primera Guerra Mundial, aunque la economía estaba en ruinas y las masas judías empobrecidas, grupos como los sionistas y el Bund -un partido socialista judío que promovía la autonomía de los trabajadores judíos- contribuyeron a fomentar un repunte en los aspectos cultural, político y social. Se crearon varias instituciones nuevas, entre ellas una escuela hebrea, un Hogar Infantil y una biblioteca. Muchos judíos religiosos perdieron su celo en la lucha contra la tendencia a la ilustración al verse cada vez más derrotados por la pobreza.

Con el advenimiento de la Segunda Guerra Mundial y la llegada de la Gestapo, los judíos de Biala lucharon por la existencia diaria. El producto del odio y la guerra se tradujo en trabajos forzados, estrangulamiento económico, deportación, campos y aniquilación final. Cuando llegó la liberación por el ejército ruso en julio de 1944, toda la comunidad judía de Biala Podlaska había sido borrada. Gracias a los historiadores, investigadores, autores y testigos cuyos años de minucioso trabajo viven en estas páginas, sus vidas nunca serán olvidadas.