Las estrellas nos prohibieron

Título original:

The Stars Forbade Us

Contenido del libro:

Ailya acaba de morir, otra vez; dejando otra vida mortal vivida relativamente bien pero lejos de ser pura y no siempre virtuosa. Regresa a la Ciudad Gris, una gran metrópolis situada en la Encrucijada donde los que son como ella, no exactamente malvados pero que no van al Cielo, viven junto a los verdaderos espíritus infernales. Muchos de esos espíritus están tratando de pasar los sabuesos infernales que custodian la puerta hacia el mundo físico y ella debe esperar un período de tiempo antes de intentar el Cruce de nuevo. Aliya es una Nephilim, hija prohibida de un ángel caído y una mujer humana. De joven, antes del Diluvio Universal, cuando su padre reinaba como rey-dios, conoció y se enamoró de un verdadero ángel, Ezi, que desconocía su herencia hasta que pidió permiso a Dios para casarse con ella. Tras negárselo y revelarle todo lo que ella es, se enfrenta a ella y se marcha enfadado. Pero Dios ofrece a Aliya la oportunidad de arrepentirse y ser redimida. Debe vivir una vida mortal verdaderamente virtuosa y se le permitirá entrar en el Cielo, donde espera reparar su noviazgo roto. A día de hoy, no ha conseguido superar su naturaleza lujuriosa.

De vuelta en la Tierra, Jack y Marcy, dos recién graduados en el instituto, han tropezado con un auténtico libro de conjuros y rituales, creado por seguidores del ocultismo en los años veinte. Estúpidamente, deciden probar un conjuro de invocación, pensando que sería genial hablar con un demonio de verdad. Pero el hechizo requiere tres personas y la única que está cerca es Kyle, el matón hermano mayor de Jack. Después de sobornarlo con un mes de gasolina y un detallado de alta gama para su precioso Ford Mustang, se convierte en un participante dispuesto. Por desgracia para todos los implicados, la fe de Jack unida a la feminidad de Marcy y a la masculinidad de Kyle es exactamente lo que necesita el hechizo. Pero en lugar de salir algo, todos caen dentro.

Entra Ailya, que tropieza con las tres almas sin juzgar y las esconde antes de que los malvados merodeadores de ese mundo las descubran. Con la esperanza de devolverlas a la Tierra sanas y salvas, se las lleva a La'sha, un sabueso infernal y amigo, en el Cruce. Con la ayuda de otro Nephilim, Erech, llegan a la Primera Puerta, pero se enteran de que los que no han sido juzgados no pueden pasar; al parecer, no funciona así. La'sha les dice que salgan de la Ciudad mientras pide ayuda. El disfraz que Ailya utilizó para ocultarlos se desvanece rápidamente y Erech acude al rescate. En las afueras de la Ciudad Gris se encuentra el territorio de los Desviantes antes de sintonizar con un Páramo que conduce a la Ciudad Ardiente. Cuando los dos espíritus infernales y tres jóvenes mortales se topan con una banda de desviados, Ailya se ve obligada a sacrificarse para que Erech pueda escapar con los impunes. Por suerte, la ayuda de La'sha llega justo a tiempo, en forma de dos ángeles de verdad. Tras salvar a los cinco seres, éstos les explican cómo hay un abismo en el otro extremo de la Ciudad Ardiente por el que los mortales, bien sujetos por ellos, pueden caer y salir al reino de los mortales. Por desgracia, uno de los ángeles es Ezi, que está consternado por las circunstancias en las que se encuentra con Ailya y lívido por las circunstancias en las que la encuentra a ella. Juntos, ángeles, espíritus de la lujuria, mortales y sabuesos del infierno atraviesan un escabroso páramo para salvar a los humanos de la condenación.