La vida a dos patas: reflexiones sobre nuestro precario bipedismo

Título original:

Life on Two Legs: thoughts on our precarious bipedalism

Contenido del libro:

En contra de la teoría antropológica actual de que la columna vertebral humana es intrínsecamente débil, este libro sostiene que el diseño básico de nuestro cuerpo de mamíferos cuadrúpedos ha evolucionado perfectamente para la vida sobre nuestras patas traseras, tanto para estar de pie como para estar sentados, lo que se ha convertido casi en la ocupación de toda una vida para muchos de nosotros.

Lamentablemente, demasiadas vidas sedentarias vienen acompañadas de una larga lista de dolores y molestias que tratamos con una lista igualmente larga de remedios.

Desde masajes a ejercicios correctivos, pasando por prótesis o muebles ergonómicos, sin resultados satisfactorios a largo plazo.

Ahora se reconoce más que nuestra forma de sentarnos -nuestra postura- es un factor que contribuye al desarrollo de nuestras dolencias. Pero la forma de mejorarla ha sido una asignatura pendiente durante siglos, hasta que F. M. Alexander, en su intento de corregir su propia dolencia paralizante, descubrió una forma totalmente nueva de abordarla.

En lugar de buscar fuera de sí mismo el remedio -es decir, buscar la silla "adecuada", o el ejercicio de 10 minutos al día, o intentar meter la cabeza hacia dentro, o bajar los hombros-, examinó lo que estaba haciendo por todas partes, todo a la vez. Esencialmente, cómo se relacionaban todas las partes de sí mismo en un todo perfectamente equilibrado. La palabra holístico en lugar de fragmentario es crucial para entender cómo se mantiene una buena postura de forma cómoda y segura en la compleja mezcla de materia biológica densamente enhebrada con más cables eléctricos que el ordenador de Alan Turing, que somos nosotros.

Alexander se veía a sí mismo como un organismo completo que se equilibraba perfectamente y se mantenía en la forma aplomada de la infancia, cuando aprendió a evitar los hábitos perjudiciales que había adquirido en la edad adulta. Con la técnica que desarrolló para transmitir la experiencia perdida de ligereza y equilibrio, todos podemos aprender de un profesor formado en su obra cómo recuperar el placer en actividades tan naturales como estar de pie y sentado, y disfrutar sin lesiones de caminar, correr, saltar y trepar, bailar y cantar y de una miríada de otros movimientos que podemos hacer con la maravillosa amplitud posible desde que llegamos sobre dos piernas.

El uso único que Alexander hizo de sus manos en la enseñanza, desarrollado a lo largo de muchos años, fue fundamental para transmitir la experiencia de sus ideas revolucionarias: en general, aprendemos y comprendemos a partir de la experiencia. Las palabras sólo pueden ser un complemento del conocimiento que llevamos dentro. Pero a veces un poco de pensamiento puede ayudar a aprender. Todos estos ensayos eran "orgánicos" y pertinentes en el sentido de que surgieron de las preguntas de los alumnos, como la pregunta más frecuente del siglo: "¿Podría enseñarme cómo se dobla? La respuesta se encuentra en F. M. Alexander, que nos enseña a experimentar, pensar y aprender.

Este libro es en parte un recuerdo de los cincuenta años de experiencia de una profesora de Alexander aprendiendo a lidiar con sus propios problemas de mal uso del cuerpo y el espíritu, y en parte una explicación de las enseñanzas de Alexander para ayudar a otros a hacer frente gradualmente a las lesiones autoinfligidas mediante un enfoque completamente diferente de la postura y la coordinación en el uso de la propia mano.